The Cake Shop, un arte hecho dulce

Eduardo Sánchez esanchez@larepublica.net | Lunes 30 octubre, 2017

Todo inició hace ocho años como un hobby en la cocina de la mamá de Karina Fernández, una diseñadora de interiores que quería cumplir un sueño de la infancia y convertirse en pastelera.

Es por ello que con batidora en mano se dispuso a hacer su primer queque y creó la marca The Cake Shop.

“Desde niña me fascinaba todo lo que tenía que ver con la creatividad o manualidades y decidí tomar un curso de pasta australiana, desde ahí no hubo vuelta atrás. Por medio de prueba y error logré ir desarrollando las recetas y técnicas que actualmente nos caracterizan, y así llegué hasta donde estamos hoy”, explicó Fernández.

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Combinando el tiempo entre su trabajo de diseñadora de interiores y diseñando pasteles, se vio obligada a tomar una decisión, y escogió volcarse tiempo completo al diseño de queques con un proyecto que la llevó a emprender y convertirse en su propia jefe.

“En un inicio solo realizaba queques y cupcakes, pero con las necesidades del mercado se ha ampliado la variedad; ofrecemos montajes de mesas de dulces completos, incluyendo la decoración total, o los dulcitos para que el cliente mismo realice su propio montaje; ofrecemos cupcakes, minidonas, cakepops, galletitas, entre otros”, agregó la empresaria.

La combinación de colores, composición y forma son el fuerte, logrando en cada diseño que sale del estudio de esta artista un sello único.

The Cake Shop cuenta con un mercado de clientes amplio, ya que trabaja con dos líneas. The Cake Shop que es más lúdica, enfocada en cumpleaños, aniversarios, corporativos o simplemente un detalle para alguien especial o hasta un antojo.

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Cakeology, en cambio, es la línea premium más glamorosa y delicada, que se especializa en bodas o eventos conceptuales.

Lo que diferencia a The Cake Shop de otras empresas que ofrecen productos similares es la pasión, la creatividad y la elaboración de queques donde se refleje cada uno de los sueños, gustos y personalidades de los clientes.

“Estamos presentes en aniversarios de noviazgo, boda, baby shower, cumpleaños de sus hijos, primera comunión, hasta en los eventos de sus empresas. Nuestros clientes confían en nosotros para hacer aún más dulce su ocasión especial”, dijo Fernández.

Los productos de The Cake Shop se pueden adquirir por encargo a través de la página de Facebook o Instagram.
Próximamente la empresaria planea abrir las puertas del estudio de la pastelería para que el público pueda visitar el lugar, así como interactuar con los pasteleros.