Tímido respaldo a despenalizar la cannabis recreativa se palpa entre diputados

Una discusión seria y profunda y sin ningún tipo de dogmatismo es lo que piden diputados de varias agrupaciones políticas antes de tomar la decisión de despenalizar la cannabis recreativa.

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Para ello, se deben de tomar en cuenta todas las aristas que involucraría esta decisión, incluyendo la salud, la seguridad, la economía y el mayor acceso de la droga para los menores de edad, entre otros temas.

Es por ello, que de momento es muy difícil saber cuál será la suerte de la iniciativa que propuso el presidente Rodrigo Chaves la semana pasada, ya que los partidos aún analizan el texto presentado.

Legisladores de agrupaciones como la Unidad, el Frente Amplio y el Liberal Progresista anunciaron un tímido respaldo, a la vez que advierten que es necesario debatir el tema a profundidad; mientras tanto, Progreso Social guarda silencio, al igual que la bancada mayoritaria de Liberación.

“El proyecto de marihuana recreativa debe servirnos como insumo para que todo el país entre en una discusión seria, profunda y sin tapujos sobre el impacto de la marihuana recreativa a nivel país y esta discusión debe pasar por analizar criterios técnicos y económicos (…) Nos complace que el tema sea traído a la Asamblea Legislativa”, dijo Johana Calvo, diputada del Partido Liberal Progresista.

La decisión para los partidos políticos no es fácil de ninguna manera, ya que un 52,5% de los costarricenses se opone a la despenalización de la cannabis con fines recreativos, según dio a conocer la empresa Opol Consultores.

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Al respecto, Daniela Rojas de la Unidad, aseveró que se trata de un tema que se debe de analizar y discutir desde todas las ópticas antes de tomar una decisión y que solo apoyaría la medida si se establece un control adecuado sobre la venta, producción y comercialización.

“Personalmente creo que debemos avanzar, hay claros ejemplos internacionales como Canadá y Uruguay y algunos estados de Estados Unidos, donde legalizando la marihuana se ha logrado controlar la delincuencia y el crimen organizado, no obstante, solo podremos avanzar siempre y cuando tengamos la reglas claras en cuanto a la venta, producción, control y uso de la planta”, dijo Rojas.

En el caso del Frente Amplio, el diputado Antonio Ortega señaló que están analizando el texto presentado por el gobierno; sin embargo, sí aclaró que están de acuerdo con la idea, además de que es necesario analizar aristas relacionadas con la seguridad, la economía y la lucha contra el narcotráfico.

"Creemos en la necesidad de que esté regulado este tema, además de que haya una campaña de educación, no obstante, nuestra opinión sobre el proyecto en cuestión la daremos en el momento oportuno", agregó el legislador.

Por último, Nueva República anunció una guerra declarada contra la medida.

“Nos opondremos con toda nuestra fuerza al proyecto del presidente Chaves que busca legalizar la marihuana para uso recreativo. He visto muchas vidas y familias destruidas por esa droga que es la puerta a otras prácticas más peligrosas”, dijo Fabricio Alvarado de Nueva República.

Las empresas que siembren o industrialicen la planta podrán operar bajo el régimen de zonas francas; sin embargo, sí estarán obligadas a pagar el impuesto especial sobre las utilidades que se calculará en un 1% sobre la renta neta.

Asimismo, los consumidores de la marihuana podrán ir a clubes, cafeterías y dispensarios a comprar y disfrutar de los productos derivados de la mata, siempre y cuando, la Asamblea Legislativa apruebe el plan que presentó la semana pasada el mandatario.

La iniciativa, también establece un máximo de 30 gramos para consumo personal, a la vez, que permitiría un tope de seis matas como autocultivo, ya que lo de contrario, se consideraría como una actividad comercial y por tanto, una violación a la ley si no se cuenta con el permiso sanitario y de cultivo.

Si Costa Rica despenaliza la cannabis recreativa tendrá acceso a “un nuevo mundo de beneficios y oportunidades para el país”, según empresarios y expertos consultados por este diario.

Más turistas, una nueva fuente de ingresos para el Estado, una mayor inversión extranjera y la generación de nuevos puestos de trabajo, son algunos de los elementos positivos que se desprenderían de esta reforma a ley penal.

Y es que la industria de la cannabis recreativa tiene un mercado mundial que oscilaría entre los $15 billones y $20 billones al año, de acuerdo con Roy Thompson, presidente del Consejo de Cáñamo y Cannabis de Costa Rica.

La propuesta enviada por el gobierno a la corriente legislativa, también prohíbe el consumo para los menores de edad, así como la posibilidad de estar involucrados en la industria por medio de un trabajo.

Por otra parte, los productores tendrán que acreditar el origen lícito de la materia que usan en la producción y venta.