Bajar tasas en colones lucharía contra pesimismo del mercado

Por un lado, sería una buena oportunidad para solicitar créditos en colones, o renovar una deuda por otra más barata, si la tasa de interés bajara.
Hace dos semanas el Banco Nacional insinuó dicho movimiento, pero por el momento todavía está revisando sus márgenes de tasas de interés, y no puede dar mayores detalles.
Por su parte, el Banco de Costa Rica podría acoplarse a la iniciativa propuesta por el Gobierno, sin embargo, todavía no ha tomado una posición al respecto.
“Hemos participado en varias reuniones para analizar el tema de las tasas, sin embargo, hasta el momento no ha existido una solicitud formal de modificarlas”, dijo Paola Mora, presidenta del Banco de Costa Rica.
El impacto de la propuesta dependería del monto de la rebaja. No obstante, el bajo nivel de confianza, tanto entre empresarios como entre consumidores, podría limitar la iniciativa de dinamizar la economía, mediante una supuesta mayor demanda para los créditos en colones.
La confianza de los empresarios continúa sin repuntar. La encuesta Pulso Empresarial demuestra que el Índice Empresarial de Confianza viene paulatinamente a la baja desde inicios de 2012, es decir, por los últimos 13 trimestres.
Para el segundo trimestre de 2015, el indicador se ubica en 5,98 puntos, de un máximo de 10.
La encuesta evidencia que más de la mitad de los empresarios descarta hacer inversiones en instalaciones o equipo en el mediano plazo.
Sucede lo mismo con el Índice de Expectativas Empresariales que elabora el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas de la Universidad de Costa Rica.
Hay además que tomar en cuenta que las expectativas de crecimiento económico, son del 2,8% para cierre del año es de 2,8%, en comparación con el 3,4%, que se esperaba al inicio de 2015, de acuerdo con el Banco Central.
También está la preocupación por el alto déficit fiscal, así como el manejo del tipo de cambio o inflación.
En cuanto a los inversionistas, no deberían pensar que una baja en las tasas de interés de los créditos se vería reflejada en un alza en los precios de sus bonos, ya que esto no se trasladaría al mercado de valores.