Vivienda para la clase media
Hogares para la clase media e impulso para el sector de la construcción, de aprobarse iniciativa en el Congreso
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 01 diciembre, 2010
La iniciativa de otorgar crédito y un bono para vivienda a familias de la clase media costarricense, parece que fue incluida entre los proyectos de ley que presenta el Ejecutivo para las sesiones extraordinarias. Una buena noticia.
Ya que este proyecto cuenta con gran respaldo entre todas las fracciones del Congreso, podría convertirse en realidad antes del 1º de mayo de 2011, beneficiando a este sector de la población y contribuyendo a la vez a dar un impulso al sector de la construcción.
En Costa Rica actualmente los que pueden acceder a crédito para vivienda son, por un lado, las personas de altos ingresos económicos y, por otro, las clases más desposeídas a quienes se ha procurado ayudar para que obtengan casas de interés social.
Sin embargo, la clase media, con bastante poder adquisitivo, no califica para recibir una ayuda estatal, pero tampoco para que los bancos le otorguen los préstamos que necesita para adquirir una vivienda.
Así las cosas, es interesante si prospera la iniciativa dictaminada recientemente de forma unánime por la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Legislativa, para beneficiar a las familias de clase media con un crédito y un bono de ¢2,5 millones en promedio, que se facilitaría en tractos mensuales para ayudar a los beneficiarios a pagar sus créditos bancarios durante los primeros años.
El sector de la construcción, por su parte, de aprobarse la iniciativa, podría desarrollar planes constructivos acordes con los montos y características de estos créditos, algo que a la fecha probablemente no están haciendo por no tener un potencial destinatario para este tipo de oferta.
El otro factor a tomar en cuenta, si todo esto se enrumba acertadamente, es que las construcciones se realicen en zonas idóneas para vivienda, con todos los servicios necesarios y con los debidos controles para garantizar a las familias beneficiadas la calidad de los materiales y procedimientos utilizados para las viviendas.
Con este proyecto, que podría beneficiar a más de 350 mil familias costarricenses, podría disminuir el déficit habitacional del país y a la vez reactivarse la economía.