Reino Unido se aísla de la UE
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 10 diciembre, 2011
Reino Unido se aísla de la UE
La cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la UE concluyó el viernes marcada por el aislamiento del Reino Unido, que se ha automarginado en la elaboración de un nuevo tratado que consolide la disciplina presupuestaria en la zona euro.
Esta cita ha alcanzado también una serie de medidas a corto plazo contra la crisis de la deuda en la zona euro, que han sido acogidas de forma favorable por los mercados financieros durante en la mañana del viernes.
A más largo plazo, la UE acordó un conjunto de medidas para imponer una estricta disciplina presupuestaria de los países de la moneda única, con la puesta en marcha de la "regla de oro" y su inclusión en las constituciones o legislaciones similares.
Además, los países con procedimiento por déficit excesivo verán cómo sus cuentas públicas son fiscalizadas por las instituciones de la UE, a fin de que retornen lo antes posible al equilibrio presupuestario.
A pesar del acuerdo general sobre qué medidas y acciones a tomar, el primer ministro británico, David Cameron, dio la nota disonante cuando se discutió el marco legal para hacerlo, ya que exigía que el centro financiero de la City de Londres quedara exonerada de ciertas regulaciones comunitarias sobre los servicios financieros, algo que el presidente francés, Nicolas Sarkzoy, consideró "inaceptable".
El resultado es que habrá un nuevo tratado intergubernamental, con al menos 23 países de la UE, mientras que Suecia, República Checa y Hungría han mostrado su disposición a sumarse, si bien precisan consultar previamente a sus parlamentos.
Al respecto, el primer ministro británico, David Cameron, dijo que no le da miedo quedarse aislado en Europa aunque reconoció que su rechazo al futuro tratado de la UE supone "un cambio" en las relaciones de su país con Bruselas.
En una entrevista con la cadena pública BBC desde Bruselas, el primer ministro insistió el viernes en que, al descolgarse del tratado, ha defendido el interés del Reino Unido aunque negó que esta postura signifique que su país pierda influencia en Europa.
"No estamos en el euro porque no queremos estar, tampoco hemos aceptado la eliminación de fronteras porque queremos controlar la inmigración ilegal y el narcotráfico", dijo
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, avanzó que el nuevo tratado se elaborará "lo antes posible" y destacó que "veintiséis líderes están a favor de participar en este esfuerzo".
El líder conservador, que aseguró que la decisión de desmarcarse del resto de Europa ha sido tomada en total acuerdo con sus socios de Gobierno, los liberaldemócratas, señaló que "hay que aceptar el hecho de que algunas veces hay que quedarse fuera y no estar incluido" y reconoció que esto no le da "miedo" cuando es lo mejor para el Reino Unido.
Por otro lado,Van Rompuy recalcó que el futuro tratado será vinculante para los países que participen en él.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, señaló que en esta cumbre que marcó el final de la presidencia semestral de su país, "nuestra preferencia era para un tratado a Veintisiete. Lo intentamos pero no hubo unanimidad".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, indicó que su institución va a ponerse en marcha "rápidamente" para la elaboración del nuevo texto.
Barroso recalcó que el nuevo tratado de carácter internacional (ya que no abarcará a toda la UE) no supondrá una cesión de nuevas competencias a Bruselas, "sino más poder de acción en las instituciones de la UE para competencias que ya existen".
El primer ministro holandés, Mark Rutte, descartó celebrar un referéndum para la ratificación del futuro tratado.
Bruselas/EFE
La cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la UE concluyó el viernes marcada por el aislamiento del Reino Unido, que se ha automarginado en la elaboración de un nuevo tratado que consolide la disciplina presupuestaria en la zona euro.
Esta cita ha alcanzado también una serie de medidas a corto plazo contra la crisis de la deuda en la zona euro, que han sido acogidas de forma favorable por los mercados financieros durante en la mañana del viernes.
A más largo plazo, la UE acordó un conjunto de medidas para imponer una estricta disciplina presupuestaria de los países de la moneda única, con la puesta en marcha de la "regla de oro" y su inclusión en las constituciones o legislaciones similares.
Además, los países con procedimiento por déficit excesivo verán cómo sus cuentas públicas son fiscalizadas por las instituciones de la UE, a fin de que retornen lo antes posible al equilibrio presupuestario.
A pesar del acuerdo general sobre qué medidas y acciones a tomar, el primer ministro británico, David Cameron, dio la nota disonante cuando se discutió el marco legal para hacerlo, ya que exigía que el centro financiero de la City de Londres quedara exonerada de ciertas regulaciones comunitarias sobre los servicios financieros, algo que el presidente francés, Nicolas Sarkzoy, consideró "inaceptable".
El resultado es que habrá un nuevo tratado intergubernamental, con al menos 23 países de la UE, mientras que Suecia, República Checa y Hungría han mostrado su disposición a sumarse, si bien precisan consultar previamente a sus parlamentos.
Al respecto, el primer ministro británico, David Cameron, dijo que no le da miedo quedarse aislado en Europa aunque reconoció que su rechazo al futuro tratado de la UE supone "un cambio" en las relaciones de su país con Bruselas.
En una entrevista con la cadena pública BBC desde Bruselas, el primer ministro insistió el viernes en que, al descolgarse del tratado, ha defendido el interés del Reino Unido aunque negó que esta postura signifique que su país pierda influencia en Europa.
"No estamos en el euro porque no queremos estar, tampoco hemos aceptado la eliminación de fronteras porque queremos controlar la inmigración ilegal y el narcotráfico", dijo
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, avanzó que el nuevo tratado se elaborará "lo antes posible" y destacó que "veintiséis líderes están a favor de participar en este esfuerzo".
El líder conservador, que aseguró que la decisión de desmarcarse del resto de Europa ha sido tomada en total acuerdo con sus socios de Gobierno, los liberaldemócratas, señaló que "hay que aceptar el hecho de que algunas veces hay que quedarse fuera y no estar incluido" y reconoció que esto no le da "miedo" cuando es lo mejor para el Reino Unido.
Por otro lado,Van Rompuy recalcó que el futuro tratado será vinculante para los países que participen en él.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, señaló que en esta cumbre que marcó el final de la presidencia semestral de su país, "nuestra preferencia era para un tratado a Veintisiete. Lo intentamos pero no hubo unanimidad".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, indicó que su institución va a ponerse en marcha "rápidamente" para la elaboración del nuevo texto.
Barroso recalcó que el nuevo tratado de carácter internacional (ya que no abarcará a toda la UE) no supondrá una cesión de nuevas competencias a Bruselas, "sino más poder de acción en las instituciones de la UE para competencias que ya existen".
El primer ministro holandés, Mark Rutte, descartó celebrar un referéndum para la ratificación del futuro tratado.
Bruselas/EFE