Agricultura tica se “cultiva” en Asia

Siete proyectos verdes se exponen hoy en Qatar en la Convención sobre Cambio Climático

Disminuir el impacto de la agricultura en el cambio climático y en la emisión de gases de efecto invernadero ha sido la tarea de siete proyectos locales.
Su buena gestión les valió para ser hoy los ejemplos que expondrá Costa Rica en la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Doha, Qatar.
La producción de leche adaptada al cambio climático, la disminución del consumo eléctrico en el sector bananero, hasta la reducción de  fertilizantes nitrogenados en la cosecha del café, son algunas acciones ya implementadas.
El fin de la participación en la convención es demostrar que, dentro del sector agrícola, el país implementa buenas prácticas para lograr su meta de carbono neutralidad en 2021.
“Queremos demostrarle al mundo que un país pequeño tiene mucho que aportar a la solución de un problema mundial”, dijo Gloria Abraham, ministra de Agricultura y Ganadería.
De este modo, empresas como Dos Pinos, Dole y también de agricultura familiar, forman parte de los proyectos dentro del programa nacional La Agricultura Tropical frente al Cambio Climático.
“La empresa ha venido generando ahorros en beneficio no solo de Dos Pinos, sino también de sus colaboradores, asociados productores, consumidores, las comunidades y el ambiente”, dijo Ana Laura Vásquez, gerente de Sostenibilidad de Dos Pinos.
Mediante su programa Agroambiental, implementado desde 2007, Dos Pinos da asistencia técnica a los productores de sus fincas para una producción sostenible.
La empresa disminuyó sus emisiones en un 5,8% de 2010 a 2011.
Mientras, el sector cafetalero está representado en la convención por Acción de Mitigación Nacionalmente Apropiada, que fomenta los sistemas agroforestales.
Se trata de la incorporación o mantenimiento de diversas especies de árboles en las plantaciones de café, que permiten retener hasta 34 TM de carbono por hectárea.
Promover la tecnología agrícola baja en carbono, es un proyecto gestionado en parte por el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Las productoras de caña de azúcar se unen en la labor. La azucarera El Viejo reutiliza el bagazo como combustible para generar energía eléctrica. Entre 2011 y 2012 recibió más de $3 millones por vender energía al Instituto Costarricense de Electricidad.
Investigar las fuentes de emisión de carbono es la última área integrada al programa, que impulsa la innovación tecnológica verde, también de la mano con el INTA.

María Fernanda Cisneros
mcisneros@larepublica.net