Turismo apunta a congresos e incentivos
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 03 agosto, 2009
Turismo apunta a congresos e incentivos
Costa Rica podría convertirse en el premio sorpresa de algunos ejecutivos que tras alcanzar sus metas corporativas o por sobrepasar las expectativas de ventas son premiados por sus compañías con la visita a un destino exótico.
El turismo de incentivos es una corriente que han impulsado las empresas de gran tamaño para recompensar el buen desempeño de sus colaboradores.
Dichas compañías muestran un especial interés por aquellos destinos que más que ofrecer un tour puedan brindar una experiencia inolvidable y servicios de alto valor agregado.
Este tipo de visitantes resultan particularmente atractivos, ya que gastan hasta nueve veces más que un turista convencional, pese a que sus estadías son menos prolongadas. El gasto promedio es de $900 y $1.200 por día.
Esta variable ha hecho que algunos empresarios del sector muestren un fuerte interés por inyectar dinamismo en la atracción de dicho segmento.
La reputación del país a nivel internacional es uno de los ganchos que utilizan los empresarios turísticos agrupados en el Costa Rica Convention Bureau para promover el turismo de incentivos, así como el de congresos.
Sin embargo, pese al potencial que tiene este nicho, el presupuesto de mercadeo turístico no ha asignado recursos dirigidos específicamente a la promoción de este sector. De ahí que se gestiona un convenio con las autoridades turísticas para promover acciones de mercadeo de forma directa.
Por el momento, el Bureau planea participar en una de las principales ferias de turismo de incentivos en Canadá a fin de capturar nuevas oportunidades en el campo.
El éxito del mercadeo del turismo de incentivos radica en la planificación del viaje. El organizador debe asegurar un producto que va más allá de una vacación y que contempla la creatividad en la planeación de las actividades.
Por ejemplo, ofrecer una clase de yoga en medio de la naturaleza, hacer fiestas temáticas, dar regalos especiales como recuerdos del país de artesanía exclusiva.
Karen Retana
kretana@larepublica.net
Costa Rica podría convertirse en el premio sorpresa de algunos ejecutivos que tras alcanzar sus metas corporativas o por sobrepasar las expectativas de ventas son premiados por sus compañías con la visita a un destino exótico.
El turismo de incentivos es una corriente que han impulsado las empresas de gran tamaño para recompensar el buen desempeño de sus colaboradores.
Dichas compañías muestran un especial interés por aquellos destinos que más que ofrecer un tour puedan brindar una experiencia inolvidable y servicios de alto valor agregado.
Este tipo de visitantes resultan particularmente atractivos, ya que gastan hasta nueve veces más que un turista convencional, pese a que sus estadías son menos prolongadas. El gasto promedio es de $900 y $1.200 por día.
Esta variable ha hecho que algunos empresarios del sector muestren un fuerte interés por inyectar dinamismo en la atracción de dicho segmento.
La reputación del país a nivel internacional es uno de los ganchos que utilizan los empresarios turísticos agrupados en el Costa Rica Convention Bureau para promover el turismo de incentivos, así como el de congresos.
Sin embargo, pese al potencial que tiene este nicho, el presupuesto de mercadeo turístico no ha asignado recursos dirigidos específicamente a la promoción de este sector. De ahí que se gestiona un convenio con las autoridades turísticas para promover acciones de mercadeo de forma directa.
Por el momento, el Bureau planea participar en una de las principales ferias de turismo de incentivos en Canadá a fin de capturar nuevas oportunidades en el campo.
El éxito del mercadeo del turismo de incentivos radica en la planificación del viaje. El organizador debe asegurar un producto que va más allá de una vacación y que contempla la creatividad en la planeación de las actividades.
Por ejemplo, ofrecer una clase de yoga en medio de la naturaleza, hacer fiestas temáticas, dar regalos especiales como recuerdos del país de artesanía exclusiva.
Karen Retana
kretana@larepublica.net