Tres años después del primer caso: Así cambió la Covid-19 a Costa Rica

El teletrabajo, las reuniones virtuales y el desarrollo de herramientas digitales, así como el avance decidido de la IA en diversos procesos productivos, educativos y culturales, son parte de las vivencias que se implementaron en medio de la pandemia y que hoy, han transformado al mundo y a Costa Rica sin posibilidad de retorno.

Lea más: Pandemia disparó la cantidad de teletrabajadores en un 1.213%

Y es que, tres años después de que se detectara el primer caso de Covid-19 en suelo nacional, es difícil imaginar a las empresas ticas sin un enfoque híbrido laboral, con el objetivo de retener el talento humano que ya no está dispuesto a ir todos los días a la oficina con un horario rígido de trabajo.

Asimismo, herramientas como Google Meet y Microsoft Teams evitan a los estudiantes de universidades privadas acudir a los centros de estudio, e incluso, acceder a centros de enseñanza superior de cualquier parte del orbe y capacitarse con los mejores profesores.

Paralelamente, aplicaciones de Inteligencia Artificial son cada vez más comunes y útiles en todos los ámbitos.

Lea más: Gastos durante el teletrabajo, ¿qué dice la ley en Costa Rica sobre esto?

“Sin duda, el teletrabajo vino para quedarse y convertirse en uno de los principales modelos de actividad productiva; asimismo, se desarrollaron nuevas herramientas, o se mejoraron aplicaciones o servicios ya existentes”, aseguró Christian Sánchez, director ejecutivo de la Cámara de Tecnologías de Información y Comunicación.

Paralelamente, esto se tradujo en ahorros en algunas empresas y la posibilidad, para las pymes en general, de presentar su oferta de valor al mercado mediante el mundo digital, agregó Sánchez.

Por otra parte, en medio de la emergencia las empresas y los trabajadores tuvieron que adaptarse a una línea de producción remota, lo cual, hizo que en innumerables casos, los trabajadores fueran contratados a distancia y hoy día, no saben lo que es ir a las oficinas de manera regular.

“El colaborador no está condicionado a un espacio físico y cuenta con la libertad de gestionar su tiempo mientras garantice los resultados en el periodo de entrega definido”, aseveró Salvador Ismayel Pérez, director de Grupo Innova.

Otro aspecto -no tan positivo - que se complicó a raíz de la pandemia fue el alto desempleo.

En estos momentos, el país reporta que el 11,8% de la población no tiene una fuente de trabajo y los expertos ven difícil que el país logre reducir esa cifra a un solo dígito.

“La reinserción laboral ha sido lenta, porque no solo la pandemia afectó, sino también otros factores externos como el alto precio del combustible y el dólar el año pasado, lo cual, complican la inversión privada y por ende la generación de empleos”, aseguró Elizabeth Morales, subgerente de Coopecaja.