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Miércoles, 11 de diciembre de 2024



FORO DE LECTORES


La Desvinculación Asistida con Humanidad

Patricia Martinez patricia.martinez@cr.gt.com | Martes 12 noviembre, 2024


Patricia Martínez


La desvinculación se refiere al proceso diseñado para facilitar la separación de un individuo de una situación, sistema u organización, mientras se mantiene una atención y respeto por su bienestar y dignidad. Aunque el término no es tan común, se puede interpretar en varios contextos:

1. Contexto Social o Psicológico: podría ser un proceso en el que se ayuda a alguien a desvincularse de una relación, entorno o situación que no le resulta saludable, proporcionando apoyo emocional y práctico durante el proceso.

2. Contexto Organizacional: en el ámbito laboral, podría referirse a una estrategia para facilitar la salida de un colaborador de una organización de manera respetuosa y humana, asegurando que el proceso sea lo menos traumático posible.

3. Contexto de Políticas Públicas: podría aludir a la implementación de políticas que faciliten la transición de individuos desde programas de asistencia o servicios sociales hacia la autosuficiencia, cuidando su bienestar durante el proceso.

4. Contexto Ético y Legal: podría implicar procesos de desvinculación de manera que se respeten los derechos y la dignidad de las personas involucradas.

Profundizando en la desvinculación asistida (Outplacement) en el contexto organizacional, nos enfocaremos en el proceso de asistencia y apoyo proporcionado a los colaboradores que están siendo despedidos o que están dejando una empresa. El objetivo principal del outplacement es facilitar una transición suave, un tanto grata y exitosa para los empleados que se separan de la organización. Dentro de un adecuado abordaje, podemos citar los siguientes elementos:

Apoyo en la búsqueda de empleo: incluye servicios como asesoramiento profesional, redacción de currículos y cartas o correos de presentación, así como la preparación para entrevistas. Esto ayuda a los colaboradores despedidos a encontrar nuevas oportunidades laborales más rápidamente.

Servicios de orientación profesional: los programas de outplacement pueden ofrecer talleres, seminarios, presentaciones y guías prácticas sobre habilidades de búsqueda de empleo, tendencias del mercado laboral y estrategias de networking. Esto equipa a las personas con conocimientos y habilidades actualizadas para la búsqueda de empleo.

Asesoramiento personalizado: los consultores que brindan este servicio otorgan asesoramiento individualizado para ayudar a los desvinculados a llegar a un autoconocimiento, identificando sus fortalezas y áreas de mejora, explorando nuevas direcciones profesionales y estableciendo objetivos de carrera.

Asistencia emocional: también puede incluir apoyo psicológico o emocional (no incluye terapia psicológica profesional) para ayudar a los colaboradores a manejar el estrés y las emociones asociadas con la pérdida de empleo, asegurando que se sientan respaldados durante la transición. La desvinculación es categorizada como un duelo, por lo que pasará por las distintas etapas de este durante el proceso de asesoría.

La empatía juega un papel crucial en la asistencia para la desvinculación, especialmente en contextos organizacionales donde se desea facilitar la transición de colaboradores que dejan una empresa, asegurando que el proceso sea manejado de manera humana y respetuosa, lo que ayuda a preservar la dignidad y el bienestar de las personas que están saliendo, tomando en cuenta los siguientes elementos:

1. Comunicación respetuosa y comprensiva: la empatía permite que los gestores y los profesionales de outplacement se comuniquen con los empleados de manera respetuosa y comprensiva. Al reconocer y validar sus emociones y preocupaciones, se facilita una conversación más abierta y menos estresante sobre la desvinculación.

2. Apoyo emocional individualizado: entender el impacto emocional de la desvinculación en cada individuo permite ofrecer un apoyo más personalizado. La empatía ayuda a proporcionar asistencia emocional que es sensible a las circunstancias y sentimientos únicos de cada persona, ayudando a mitigar el estrés y la ansiedad asociados con la pérdida de empleo.

3. Reconocimiento de logros y contribuciones: mostrar empatía incluye reconocer y valorar las contribuciones y logros del colaborador durante su tiempo en la empresa. Esto no solo ayuda a mantener la dignidad de la persona desvinculada, sino que también facilita una despedida más positiva y respetuosa.

4. Facilitar el proceso de transición: la empatía en el proceso de outplacement se traduce en una asistencia más atenta y comprensiva. Esto puede incluir el ofrecimiento de recursos como asesoría en la búsqueda de empleo, talleres de desarrollo profesional y redes de apoyo que se ajusten a las necesidades individuales del colaborador.

5. Construcción de relaciones positivas: abordar la desvinculación con empatía ayuda a mantener una relación positiva entre el exempleado y la empresa, lo que puede ser beneficioso para futuras referencias y para la reputación de la organización en el mercado laboral.

Beneficios para la Empresa: el proporcionar outplacement al colaborador desvinculado, puede mejorar la reputación organizacional y reducir el impacto negativo en la moral del personal restante, pues se genera una reacción de incertidumbre en los colaboradores que quedan dentro de la organización. También puede ayudar a mitigar la fuga de talento o el riesgo de posibles litigios relacionados con despidos.

Por otra parte, un proceso deshumanizado de outplacement ocurre cuando la asistencia para la desvinculación de empleados se lleva a cabo de manera fría, impersonal y carente de empatía. Este enfoque puede agravar el estrés y la ansiedad del colaborador en lugar de facilitar una transición suave, dando como resultado algunas de estas circuntancias:

Comunicación impersonal: la información sobre la desvinculación se transmite de manera estándar y sin consideración personal, como a través de correos electrónicos genéricos, mensajes automáticos o mensajes informales de pasillo. No se brinda una comunicación directa o personalizada.

Falta de apoyo emocional: no se ofrece ningún tipo de asistencia emocional o psicológica. Las personas desvinculadas pueden sentirse abandonadas, sin ningún recurso para manejar el impacto emocional de su pérdida de empleo.

Servicios de outplacement limitados: los servicios proporcionados son básicos y no adaptados a las necesidades individuales del colaborador. Por ejemplo, solo se ofrece un servicio estándar de redacción de currículos sin asesoramiento personalizado, pues no hay interés genuino y empático para con la persona saliente.

En resumen, el outplacement o desvinculación asistida humanizada es una herramienta valiosa que facilita la transición de los colaboradores salientes, ayudándolos a reinsertarse en el mercado laboral de manera efectiva mientras se asegura que el proceso se maneje de manera ética, profesional y humana.

Patricia Martínez, Gerente Asociada de Consultoría en Capital Humano, Grant Thornton Costa Rica







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