Hospital Metropolitano sede Lindora mejora la atención pediátrica con servicio de emergencias especializado

Desde su sede en Lindora, el Hospital Metropolitano ofrece un servicio de emergencias pediátricas, caracterizado por la calidad, experiencia y respaldo de un equipo de profesionales que velan por la salud integral de los menores y la tranquilidad de sus padres en todo momento.

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La unidad cuenta con dos pediatras disponibles en horario de lunes a viernes de 7:00 a.m. a 8:00 p.m. y sábados y domingos de 7:00 a.m. a 11:00 p.m., para ofrecer atención médica y quirúrgica a pacientes entre los cero a 14 años, quienes disponen también de las especialidades y servicios de PediaClinic.

“Nuestra atención especial se siente desde el inicio, el diferencial clave radica en la atención exclusiva de pediatras, proporcionando conocimiento médico y hasta la experiencia manual para procedimientos específicos. Además, los médicos cuentan con expertise en cuidados intensivos, reconocimiento temprano de emergencias y seguimiento continuo desde la sala de urgencias, hasta una posible hospitalización”, explicó José Leonel Rosales, especialista en pediatría del Hospital Metropolitano.

El servicio también contempla laboratorio, Rayos X y una enfermera especialista en pediatría, con amplia experiencia y altamente capacitada, quien se ha encargado de formar al personal de enfermería de la institución.

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“El paciente pediátrico es un paciente que, en ocasiones, se sale de lo típico de todo lo que los profesionales en salud suelen atender, por lo que este apoyo es fundamental” agregó el médico.

En el ámbito tecnológico, este servicio se caracteriza, no solo por el uso de expediente electrónico, sino también por contar con equipos de última generación como TAC, resonancia, y ultrasonidos de alta gama; junto con la posibilidad de realizar ultrasonidos al pie de la cama, para diagnósticos rápidos, especialmente en casos de trauma.

Además, la atención no se limita a lo médico, pues también ofrece apoyo emocional a los padres, con explicaciones detalladas sobre el cuadro clínico y la resolución de dudas.

“Este enfoque humano contribuye a una experiencia integral para la familia”, indicó Rosales.

En cuanto a seguridad, el servicio se rige por rigurosos protocolos internacionales, respaldados por la Organización Mundial de la Salud, garantizando estándares óptimos para la atención pediátrica a nivel hospitalario e institucional.

“Nuestro 'ojo clínico' es fundamental, permitiendo una evaluación precisa de los niños y una pronta identificación de patologías pediátricas. La experiencia clínica guía hacia diagnósticos oportunos y tratamientos adecuados, marcando la diferencia en el abordaje de los casos” subrayó Rosales.