Mejora esperanza de los ticos

Consumidores menos pesimistas

Costo de la vida y desempleo entre las principales preocupaciones

Después de nueve meses de encontrarse estancada, la confianza del consumidor sobre su situación económica mejoró en mayo: sin embargo, se mantiene lejos de alcanzar la magnitud que registró hace tres años, antes de que Laura Chinchilla ingresara como presidenta.

El Índice de Confianza del Consumidor considera tanto el momento actual como el futuro económico.
Ambos mostraron incrementos estadísticamente significativos con respecto al periodo previo.
“La mejora del índice significa que están menos pesimistas que hace tres meses pero siempre bajo niveles de incertidumbre”, manifestó Johnny Madrigal, investigador de la Escuela de Estadística de la UCR, encargada de generar estas mediciones cada tres meses.
Entre lo positivo destacan las expectativas de que las tasas de interés siguen mejorando.
La mayor parte de los encuestados no espera que las tasas de los préstamos de dinero aumenten en los próximos 12 meses, cifra que a pesar de mantenerse alta, es inferior a la registrada hace un año.
Pero entre lo negativo están los salarios, desempleo, pobreza y el costo de la vida
En el caso de los salarios, existe poca fe de que estos crezcan al menos a un ritmo similar al de la inflación.
En el tema del desempleo y la pobreza, más del 50% de los encuestados prevé que serán mayores durante los próximos 12 meses.
“Los altos precios de los bienes regulados registrados en los últimos meses, además del ambiente político, han contribuido a que la confianza actual del consumidor no mejore. Estamos en un año preelectoral, hay incertidumbre y hasta ahora la imagen del Gobierno no ha sido la mejor”, comentó Walter Chinchilla, economista consultor de Pymeconomía.
En línea con lo anterior cabe mencionar el comportamiento de la economía local, la cual ha mostrado un crecimiento menor además de un índice de actividad económica que se ha desacelerado.

Gabriela Vargas
gvargag@larepublica.net