Casi cuatro años se atrasan obras de infraestructura por afán de políticos de arrancar sin preingeniería

El afán por colocar la primera piedra, o bien, cortar la cinta en vez de impulsar un ciclo ordenado de trabajo que incluya la preingeniería, es uno de los principales escollos a la hora de desarrollar obra pública, según la Cámara de la Construcción.

Lea más: Rezago en infraestructura de 30 años quedó muy lejos de resolverse en gobierno de Carlos Alvarado, según expertos

Y es que los grandes proyectos de infraestructura se están retrasando casi cuatro años -hasta 1.250 días – por la ausencia de un proceso ordenado.

Muchas obras se están arrancando hoy día, sin contar con las expropiaciones o la reubicación de los servicios públicos.

Uno de los mejores ejemplos es la ampliación de la ruta 32, la cual, inició en el gobierno de Luis Guillermo Solís y más de años después, todavía depende de unas 160 expropiaciones, las cuales, se estarían resolviendo en un año más en el mejor de los escenarios.

Lea más: “Infraestructura requiere intervención urgente de instituciones a cargo”, según Cámara de la Construcción

Los proyectos con preingeniería concluida o casi concluida sufrieron atrasos de un 8%, mientras que aquellos que no la tenían del todo, se retrasaron un 135%, es decir, más del doble del plazo.

“La matriz de infraestructura nos muestran la necesidad de que el tema sea asumido con total seriedad, porque lejos de mejorar tenemos varios años en retroceso. Los atrasos en los proyectos viales se traducen en altos costos que asumimos todos los costarricenses, en momentos en que necesitamos un uso eficiente y responsable de los recursos públicos. La actual administración heredó nueve proyectos con orden de inicio y que todavía no tienen la preingeniería concluida”, manifestó Carlos Trejos, Presidente de la Cámara de la Construcción.

Otros proyectos grandes que están dando tumbos son la ampliación Circunvalación Norte y la ampliación de la carretera a San Carlos, los cuales, registran un notable atraso.

“Este año, nuevamente, los análisis realizados vienen a demostrar la importancia que tiene el desarrollo de la preingeniería en el buen o mal desempeño de los proyectos. Seguimos viendo obras con orden de inicio sin tener las etapas previas concluidas y esta es una práctica que debe ser corregida, porque hemos demostrado que solo se traduce en atrasos y sobrecostos en los proyectos”, concluyó Roberto Fiatt, miembro del Comité de Infraestructura de la Cámara.