Irresponsabilidad del ICE genera aumento en tarifas eléctricas y en nuestra pobreza

Ricardo Trujillo Molina MScEE

gerencia@fibrotel.cr

Lo vengo advirtiendo desde hace años, la irresponsabilidad del ICE ha generado un alza exorbitante del 27% en tarifas eléctricas para el resto del 2023 y para todo el 2024. Hay que repetirlo nuevamente sin tapujos, es la irresponsabilidad del ICE la causante y no el cambio climático, ni el fenómeno del niño como pretenden algunos justificarlo.

Y decimos que ha sido la irresponsabilidad del ICE la causante porque durante más de 6 años la institución se dedicó a promocionarse mundialmente como la empresa generadora eléctrica utilizando el 100% de recursos renovables, a difundir el mito que contaba con un 100% de potencia extra instalada con respecto a la máxima demanda, a dar por terminado los contratos con múltiples generadores privados y a enfrentar los procesos judiciales que por incumplimiento de contrato le presentaron las empresas perjudicadas, siendo el mas notorio, el de la planta fotovoltaica de VALLE ESCONDIDO.

Ahora que toda la cuenca del caribe se ve afectada por una temporada escasa en lluvias, fenómeno de frecuencia predecible conocido como EL NIÑO, enfrentamos una escasez severa de potencia en todas las plantas hidroeléctricas, con el fin de evitar que los embalses de agua sean reducidos a su sequia total, en especial los plurianuales como el del arenal y el del reventazón. Esta escasez severa del recurso hídrico obligó al ICE desde inicios del presente año a importar energía del MER a cada vez mas alto costo, y cuando ese precio se disparó a niveles nunca antes vistos como el de US$ 700 por megavatio hora, el ICE tuvo que arrancar sus plantas térmicas con bunker importado para evitar pagar el altísimo costo de la importación. Hace apenas un año, la presidencia ejecutiva del

ICE se proponía el cierre definitivo de esas plantas térmicas por su falta de uso, por su alto costo de mantenimiento y por su inoperancia.

Desde hacía más de 7 años, un estudio altamente técnico elaborado por técnicos contratados por el BID y con la colaboración de ingenieros del ICE, recomendaba la diversificación de la matriz de generación eléctrica dependiente en un 75% del recurso hídrico. Ese estudio fue engavetado, no se atendieron sus recomendaciones y ahora todos en costa rica pagaremos las serias consecuencias de carácter económico. En especial los hogares de mas escasos recursos, ya que un 27% de alza en tarifas eléctricas representa para ellos, un desembolso no previsto por mas de 5 a diez mil colones mensuales.

Si el ICE ejecutará las recomendaciones de los expertos, no estaría en los serios problemas que hoy enfrenta (larepublica.net)

El estudio recomendó que la matriz de generación eléctrica debía expandirse a corto plazo con plantas eólicas y solares distribuidas en todo el territorio nacional para evitar la sobre carga en redes de transmisión y distribución, así como en las subestaciones.

Ya es tarde para lamentos y para corregir rumbo

Aun cuando ahora el ICE se proponga la construcción de esas plantas eólicas y solares, mal identificadas y etiquetadas como de recursos renovables como siempre lo han sido las hidroeléctricas, no entrarán en operación antes de un par de años. Los tiempos de entrega de los dispositivos para una subestación de una planta solar o eólica como son los transformadores, relevadores y mecanismos de protección, como resultado de la transición energética que el mundo desarrollado ha tomado bien en serio, son hasta de tres años plazo.

El irreparable impacto dañino del alza en tarifas eléctricas tendrá serias consecuencias en nuestra economía por varios años, desde la reducción en el monto de las inversiones en producción, hasta la reducción del consumo individual. Alguien dentro del ICE ha sido el responsable de esa política errada e irresponsable, pues no se le puede achacar totalmente la culpa a la naturaleza, al cambio climático y menos al marco legal restrictivo. Alguien tendrá que pagar los platos rotos o como siempre ocurre, quedará impune por sus actos lesivos al interés público.