¿Hacia dónde vamos?
| Lunes 15 junio, 2009
¿Hacia dónde vamos?
Para 2030 un 60% de la población mundial vivirá en las ciudades, cada día el planeta es más urbano. Las ciudades crecen a un ritmo frenético, la emigración del campo a la ciudad ha desencadenado fenómenos nunca antes vistos, de 2000 a 2020, las ciudades chinas del delta del Río de las Perlas: Cantón, Dongguan, Hong Kong, Shenzhen y Zhuhai, pasarán de 12 millones a 36 millones de habitantes.
Lagos, Nigeria, con 15 millones de habitantes crece mil habitantes al día; Singapur pasó en 15 años de 1,5 millones a 4 millones de habitantes; Corea en 40 años ha pasado del 80% de población rural al 80% de población urbana.
Los países día a día pierden peso geopolítico por la predominancia de lo global, las redes de alta tecnología y los procesos económicos globales dictan el rumbo e importancia de las regiones. La red de transnacionales que cubre el planeta opera desde las llamadas ciudades o regiones globales, generando flujos de capital, de información, de personas, de materia prima, etcétera, muchas de esas regiones hoy son más importantes incluso que su país, al ser nodos de actividad para la gran red mundial.
Las migraciones son la norma, millones de personas son nómadas a lo largo del planeta, ayer en Sao Paulo, mañana en Delhi, pasado mañana en Sídney. Trabajadores chinos construyen nuestro Estadio Nacional... Además hay exploración constante de lo que se hace en el globo, los de Emiratos Arabes estudiaron a fondo el modelo de puertos de Singapur; los nigerianos van a Tokio, México D.F., o cualquier otro lugar del orbe donde puedan aprender cómo competir mejor; los panameños capacitan a sus ciudadanos en INCAE y de paso observan nuestras fortalezas en materia de servicios y alta tecnología.
En medio de esta realidad global, Costa Rica se debate sobre la aplicación del Plan Regional Urbano de la Gran Area Metropolitana 2008-2030 (PRUGAM), que tiene su origen en la revisión del Plan Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU) de la GAM de 1982.
El PNDU fue desarrollado por el INVU basado en las tendencias del urbanismo de la escuela moderna, doctrina que ha fracasado en el resto del planeta en su afán de regular, controlar y prever el crecimiento de las ciudades. No existe una ciudad en la tierra que el urbanismo de esta escuela haya podido rescatar del crecimiento desbordado del tejido urbano, del caos vehicular, del abandono y de la decadencia de las ciudades.
Los arquitectos y urbanistas nos hemos esmerado en vano en darle forma y límites geométricos a la ciudad, olvidamos que es un organismo vivo y dinámico, que muta y se autorregula. Hoy el PRUGAM pretende terminar la Circunvalación que se proyectó según las necesidades de hace 50 años, habilitar el TREM usando un trazo del ferrocarril en el que se excluyen el sur y el oeste de San José, regular y dirigir el crecimiento de las ciudades de la GAM ya desbordadas, y nos hemos olvidado de lo medular: ¿Cómo es la GAM que queremos para 2030? ¿Cuál es el papel de Costa Rica en el entorno global? ¿Es la GAM una región global o deberá serlo? ¿Debemos remendar nuestra realidad urbana o de una vez por todas proyectar un modelo de ciudad y de país? ¿Cuál es nuestra agenda 21? ¿Nos vamos a especializar en servicios y alta tecnología o será el turismo nuestro camino? ¿Debemos planificar únicamente la GAM y dejar por la libre el 96% del territorio y el 48% de los habitantes? ¿Se justifica tener 31 cantones, municipalidades, burocracias, planes reguladores, etc. en 1.785 km2 de la GAM?
Singapur y Dubái, referencias obligadas en planificación primero definieron el qué y después el cómo... Estamos equivocando el camino por no pensar antes de actuar.
No se trata de botar el PRUGAM a la basura, el estudio brinda herramientas y soluciones que se pueden utilizar o ajustar. ¿Cuáles?
Las que se adapten al modelo de desarrollo que debemos primero definir. ¿O seguiremos caminando sin rumbo...?
Rafael Solís Chacón
Arquitecto
Para 2030 un 60% de la población mundial vivirá en las ciudades, cada día el planeta es más urbano. Las ciudades crecen a un ritmo frenético, la emigración del campo a la ciudad ha desencadenado fenómenos nunca antes vistos, de 2000 a 2020, las ciudades chinas del delta del Río de las Perlas: Cantón, Dongguan, Hong Kong, Shenzhen y Zhuhai, pasarán de 12 millones a 36 millones de habitantes.
Lagos, Nigeria, con 15 millones de habitantes crece mil habitantes al día; Singapur pasó en 15 años de 1,5 millones a 4 millones de habitantes; Corea en 40 años ha pasado del 80% de población rural al 80% de población urbana.
Los países día a día pierden peso geopolítico por la predominancia de lo global, las redes de alta tecnología y los procesos económicos globales dictan el rumbo e importancia de las regiones. La red de transnacionales que cubre el planeta opera desde las llamadas ciudades o regiones globales, generando flujos de capital, de información, de personas, de materia prima, etcétera, muchas de esas regiones hoy son más importantes incluso que su país, al ser nodos de actividad para la gran red mundial.
Las migraciones son la norma, millones de personas son nómadas a lo largo del planeta, ayer en Sao Paulo, mañana en Delhi, pasado mañana en Sídney. Trabajadores chinos construyen nuestro Estadio Nacional... Además hay exploración constante de lo que se hace en el globo, los de Emiratos Arabes estudiaron a fondo el modelo de puertos de Singapur; los nigerianos van a Tokio, México D.F., o cualquier otro lugar del orbe donde puedan aprender cómo competir mejor; los panameños capacitan a sus ciudadanos en INCAE y de paso observan nuestras fortalezas en materia de servicios y alta tecnología.
En medio de esta realidad global, Costa Rica se debate sobre la aplicación del Plan Regional Urbano de la Gran Area Metropolitana 2008-2030 (PRUGAM), que tiene su origen en la revisión del Plan Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU) de la GAM de 1982.
El PNDU fue desarrollado por el INVU basado en las tendencias del urbanismo de la escuela moderna, doctrina que ha fracasado en el resto del planeta en su afán de regular, controlar y prever el crecimiento de las ciudades. No existe una ciudad en la tierra que el urbanismo de esta escuela haya podido rescatar del crecimiento desbordado del tejido urbano, del caos vehicular, del abandono y de la decadencia de las ciudades.
Los arquitectos y urbanistas nos hemos esmerado en vano en darle forma y límites geométricos a la ciudad, olvidamos que es un organismo vivo y dinámico, que muta y se autorregula. Hoy el PRUGAM pretende terminar la Circunvalación que se proyectó según las necesidades de hace 50 años, habilitar el TREM usando un trazo del ferrocarril en el que se excluyen el sur y el oeste de San José, regular y dirigir el crecimiento de las ciudades de la GAM ya desbordadas, y nos hemos olvidado de lo medular: ¿Cómo es la GAM que queremos para 2030? ¿Cuál es el papel de Costa Rica en el entorno global? ¿Es la GAM una región global o deberá serlo? ¿Debemos remendar nuestra realidad urbana o de una vez por todas proyectar un modelo de ciudad y de país? ¿Cuál es nuestra agenda 21? ¿Nos vamos a especializar en servicios y alta tecnología o será el turismo nuestro camino? ¿Debemos planificar únicamente la GAM y dejar por la libre el 96% del territorio y el 48% de los habitantes? ¿Se justifica tener 31 cantones, municipalidades, burocracias, planes reguladores, etc. en 1.785 km2 de la GAM?
Singapur y Dubái, referencias obligadas en planificación primero definieron el qué y después el cómo... Estamos equivocando el camino por no pensar antes de actuar.
No se trata de botar el PRUGAM a la basura, el estudio brinda herramientas y soluciones que se pueden utilizar o ajustar. ¿Cuáles?
Las que se adapten al modelo de desarrollo que debemos primero definir. ¿O seguiremos caminando sin rumbo...?
Rafael Solís Chacón
Arquitecto