Empresarios advierten que plan fiscal de Obama no creará empleos
| Lunes 25 mayo, 2009
Empresarios advierten que plan fiscal de Obama no creará empleos
Washington -- El presidente Barack Obama prometió este mes crear empleos en su país poniendo fin a incentivos fiscales para compañías estadounidenses como Caterpillar Inc., General Electric Co. y Microsoft Corp. que “mudan puestos de trabajo al exterior”.
Una medida de $190.000 millones propuesta por Obama este mes creará pocos trabajos, si alguno, según economistas, empresas y algunos de los partidarios del presidente. Algunos expertos dijeron que poner fin a las tres técnicas de evasión fiscal en territorio extranjero puede incluso tener un efecto negativo al lentificar la expansión a mercados nuevos que facilita aumentar la producción interna.
“Es un poco engañoso”, dijo Eric Toder, experto en política fiscal del Urban Institute de Washington y ex funcionario del Departamento del Tesoro bajo el presidente Bill Clinton. Toder dijo que si bien las propuestas de Obama “cierran escapatorias que erosionan la base fiscal empresarial”, no “van a tener ningún efecto en el empleo en Estados Unidos”.
El 4 de mayo, Obama dijo que “por años” los dirigentes del Partido Demócrata han pedido que “se ponga fin a las ventajas fiscales para las compañías que exportan empleos al extranjero y se den ventajas fiscales a las compañías que crean empleos aquí, en Estados Unidos”. Esto es lo que su propuesta hará, dijo el presidente.
Ese mensaje --elemento común de las campañas de candidatos presidenciales demócratas como Obama en el 2008, el senador John Kerry en el 2004 y el vicepresidente Al Gore en el 2000-- se dirige en parte a los grupos sindicales. Estos han argumentado que el derogar las ventajas fiscales contribuiría a la recuperación de algunos de los tres millones de empleos industriales que se han perdido desde 1988.
“Las empresas estadounidenses cosechan los beneficios de los millones gastados en cabildeo en Washington con códigos fiscales que les permiten evadir su responsabilidad de pagar impuestos y de hecho les pagan para que creen empleos en el extranjero”, dijo Anna Burger, secretaria-tesorera del sindicato Service Employees International Union, la segunda mayor agrupación obrera de Estados Unidos.
Por su parte, compañías y organismos patronales dijeron que planean combatir la propuesta de Obama advirtiendo que destruiría empleos.
“Si las propuestas fiscales de Obama se adoptan, la cuota estadounidense del mercado mundial se erosionará, y esto tendrá un efecto negativo de largo plazo en los empleos en Estados Unidos que apoyan esos mercados”, dijo Cathy Schultz, vicepresidenta de política fiscal del National Foreign Trade Council, uno de varios grupos de presión de Washington que han formado una coalición que incluye a compañías como GE y Microsoft para oponerse al plan de Obama.
La coalición mencionó estudios que indican que la expansión en el exterior estimula el crecimiento y la creación de empleos dentro del país.
“Las firmas que crecen en el exterior crecen dentro de su país de origen también”, dijo Fritz Foley, profesor de Economía en la Universidad de Harvard que escribió un informe sobre el asunto con su colega Mihir Desai y el economista James Hines, de la Universidad de Michigan.
Ginny Terzano, directora principal de relaciones públicas de Microsoft, dijo que esta ha sido la experiencia del mayor fabricante mundial de programas informáticos.
Washington -- El presidente Barack Obama prometió este mes crear empleos en su país poniendo fin a incentivos fiscales para compañías estadounidenses como Caterpillar Inc., General Electric Co. y Microsoft Corp. que “mudan puestos de trabajo al exterior”.
Una medida de $190.000 millones propuesta por Obama este mes creará pocos trabajos, si alguno, según economistas, empresas y algunos de los partidarios del presidente. Algunos expertos dijeron que poner fin a las tres técnicas de evasión fiscal en territorio extranjero puede incluso tener un efecto negativo al lentificar la expansión a mercados nuevos que facilita aumentar la producción interna.
“Es un poco engañoso”, dijo Eric Toder, experto en política fiscal del Urban Institute de Washington y ex funcionario del Departamento del Tesoro bajo el presidente Bill Clinton. Toder dijo que si bien las propuestas de Obama “cierran escapatorias que erosionan la base fiscal empresarial”, no “van a tener ningún efecto en el empleo en Estados Unidos”.
El 4 de mayo, Obama dijo que “por años” los dirigentes del Partido Demócrata han pedido que “se ponga fin a las ventajas fiscales para las compañías que exportan empleos al extranjero y se den ventajas fiscales a las compañías que crean empleos aquí, en Estados Unidos”. Esto es lo que su propuesta hará, dijo el presidente.
Ese mensaje --elemento común de las campañas de candidatos presidenciales demócratas como Obama en el 2008, el senador John Kerry en el 2004 y el vicepresidente Al Gore en el 2000-- se dirige en parte a los grupos sindicales. Estos han argumentado que el derogar las ventajas fiscales contribuiría a la recuperación de algunos de los tres millones de empleos industriales que se han perdido desde 1988.
“Las empresas estadounidenses cosechan los beneficios de los millones gastados en cabildeo en Washington con códigos fiscales que les permiten evadir su responsabilidad de pagar impuestos y de hecho les pagan para que creen empleos en el extranjero”, dijo Anna Burger, secretaria-tesorera del sindicato Service Employees International Union, la segunda mayor agrupación obrera de Estados Unidos.
Por su parte, compañías y organismos patronales dijeron que planean combatir la propuesta de Obama advirtiendo que destruiría empleos.
“Si las propuestas fiscales de Obama se adoptan, la cuota estadounidense del mercado mundial se erosionará, y esto tendrá un efecto negativo de largo plazo en los empleos en Estados Unidos que apoyan esos mercados”, dijo Cathy Schultz, vicepresidenta de política fiscal del National Foreign Trade Council, uno de varios grupos de presión de Washington que han formado una coalición que incluye a compañías como GE y Microsoft para oponerse al plan de Obama.
La coalición mencionó estudios que indican que la expansión en el exterior estimula el crecimiento y la creación de empleos dentro del país.
“Las firmas que crecen en el exterior crecen dentro de su país de origen también”, dijo Fritz Foley, profesor de Economía en la Universidad de Harvard que escribió un informe sobre el asunto con su colega Mihir Desai y el economista James Hines, de la Universidad de Michigan.
Ginny Terzano, directora principal de relaciones públicas de Microsoft, dijo que esta ha sido la experiencia del mayor fabricante mundial de programas informáticos.