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CHISPORROTEOS

Alberto Cañas afcanas@intnet.co.cr | Sábado 11 julio, 2009



CHISPORROTEOS


La mañana que ocurrió lo de Honduras, me llamó a mi casa un periodista a quien no conocía (pero sobre el cual me han dado datos en estos días) y me pidió mi opinión sobre lo que acababa de suceder. Sin conocer detalles sobre el particular, le expresé mi satisfacción de que hubiera caído un demagogo aliado de Chávez, de Ortega y de los hermanos Castro (¡valiente compañía!), que estaba inventando plebiscitos ilegales en busca de una inconstitucional reelección (como es la moda ahora), que había desobedecido a la Corte Suprema de Justicia, y unas cuantas cosas más.
No me preocupé, no es mi costumbre porque tengo fe en mis colegas, de buscar luego lo que el periodista publicó, pero sí me entero de que no ha faltado algún mequetrefe que quiera hacerme escándalo presentándome como partidario de los cuartelazos, los golpes de Estado y demás actos tan practicados por Chávez.
Tengo por norma juzgar los hechos por sus consecuencias, y jamás los actos políticos ni a los gobiernos por su legalidad, porque la legalidad es con frecuencia muy alcahueta. Al fin y al cabo, en 1948 apoyé un levantamiento armado contra un gobierno que gozaba de “legalidad” ante la comunidad internacional, aunque no ante el pueblo costarricense. Me pongo a pensar si faltó un Insulza que pidiera a don Pepe Figueres deponer las armas.
Escribo estas líneas mientras están reunidos en casa de don Oscar Arias representantes de los dos gobernantes hondureños que pretenden ser legítimos: el que fue destituido y el que lo sucedió. Y espero que de lo que conversen salga algo que de veras valga la pena.
Si el señor Zelaya admite ser juzgado por su desobediencia a la Corte Suprema de Justicia y demás cargos que hay contra él, santo y bueno. Lo que urge no es tanto evitar los cuartelazos (que ya casi no existen desde que a Chávez le fracasó el suyo) sino evitar lo que ahora está de moda: las demagogias y los trucos tipo plebiscito para perpetuarse en el poder los que lo ejercen. Siempre he creído que una de las grandes conquistas de las revoluciones americana y francesa fue el nacimiento y consolidación de los gobiernos de plazo fijo, y la desaparición de los vitalicios, que, a la larga (por más duraderos) son más peligrosos que los cuartelazos.
Reitero aquí lo que dije antier a un entrevistador: no creo que el afiliarse a un partido ni el aceptar una posición directriz en él, deban ser limitaciones a la libertad de expresión del individuo, ni que éste deba, antes de emitir alguna opinión, consultar si ella coincide con la de la mayoría de los afiliados a ese partido. En el caso concreto, entiendo que el PAC prepara (tal vez cuando estas líneas se publiquen ya haya aparecido) un pronunciamiento sobre el cuartelazo de Honduras, dentro de la línea que marcó nuestro candidato don Ottón Solís. Me parece bien que se haga, aunque no estoy seguro de que todos, absolutamente todos los adherentes del PAC vayan a estar de acuerdo con todas absolutamente todas las palabras y expresiones que contenga. Al fin y al cabo no somos un partido totalitario, comunista, ni fascista. He solicitado que las declaraciones que publiqué en este periódico antier jueves sean insertadas en las páginas del PAC en Internet.
Es lamentable que la saludable salida de Zelaya del gobierno se debiera a un cuartelazo. Voy tan lejos en ese camino, que cuando hace muchos años un amigo me planteó si yo no hubiera preferido un cuartelazo contra Picado en el 48 que nos habría economizado 2 mil muertos, no pude decirle que sí, y me quedé prefiriendo los 2 mil muertos de la guerra civil, que abonaron esta tierra y le dieron días de esplendor.
Pero confieso que la penetración del militarismo chavista en Centroamérica usando como instrumentos a Ortega y a Zelaya, me alarma profundamente. Y me dolía ver que algunos costarricenses, confundiendo la demagogia con la democracia, se ufanaban de ver a ese terceto en alianzas con el semicentenario gobierno de Cuba, el más largo en la historia de la humanidad… hasta donde yo la conozco. Sigo creyendo que la democracia supone e impone gobiernos de plazo fijo y alternabilidad en el poder.

afcanas@intnet.co.cr

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