Inversión de $15 mil haría de su casa un “hogar inteligente”

Con su “smartphone” y una inversión que oscilaría entre los $10 mil y $15 mil usted podría hacer de su casa, un “hogar inteligente”.

Iluminación, aire acondicionado, artículos de línea blanca, regletas inteligentes -para controlar el consumo -, enrutadores, portones eléctricos, cámaras de seguridad y hasta una fuente de energía que garantiza la señal de Internet aunque no haya suministro eléctrico, son parte del abanico de posibilidades que tienen los usuarios hoy en día.

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Se trata de una tendencia de ambientes sostenibles e interconectados que va en crecimiento y que además, le ayudaría a ahorrar en el suministro eléctrico.

Por otra parte, con el avance de la tecnología y el desarrollo de las redes 5G, las opciones serán aún mayores, a tal punto, que su celular se convertirá en el centro de su casa, a la par del Internet de las Cosas.

Adquirir estos productos, ya sea de forma independiente o por medio de una asesoría, es además un deleite para los amantes de la vida moderna, pero de acuerdo con expertos, conlleva una inversión significativa de entrada.

No obstante, con el paso del tiempo el ahorro en energía eléctrica terminará pagando por la inversión.

“Tomando como ejemplo una casa de tres habitaciones con sistema eléctrico inteligente, y suponiendo que cuenten con sistemas de iluminación, paneles solares, aire acondicionado, persianas mecánicas, control de acceso a la cochera a través del teléfono, entre otros, la inversión podría rondar entre los $10 mil y $15 mil, según cantidades de equipos y maneras en que se comuniquen entre sí y con el sistema de gestión inteligente”, dijo Jason Iong, director de ventas por canal de Schneider Electric Centroamérica.

Tener un “hogar inteligente” implica la posibilidad de monitorear el consumo de energía de la residencia, a través de la interconectividad del software con tomas de corriente inteligentes y compatibilidad con sistemas como “Amazon Alexa”, “Google Home” y “Philips Hue”.

Asimismo, el usuario recibe alertas de eventos que estén provocando un gasto innecesario de electricidad, como aperturas prolongadas de la puerta del refrigerador o cargadores u otros dispositivos enchufados por largos períodos, generando el tradicionalmente llamado “consumo fantasma”.

“La conectividad en nuestros hogares está pensada para simplificar nuestras vidas. Ahora en lugar de desplazarnos para apagar una luz, le hablamos a un sistema de reconocimiento de voz y hace esa tarea por nosotros, así como la programación de otras actividades diarias, como programar fuentes de agua, aires acondicionados, televisores, riego etc. Esto puede generar muchos ahorros, pero no se debe dejar de lado las fuentes de mayor consumo eléctrico”, advirtió Henry Jiménez, experto en tecnología de BC Network.

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Una importante cantidad de fabricantes ofrecen al usuario la posibilidad de adaptar su casa, pasando de lo analógico a lo digital sin muchas complicaciones, eso sí, de tomar la decisión, será mejor que aliste su billetera o vaya haciendo un ahorro; lo bueno es que la tecnología le permitirá compensar esa inversión con el paso del tiempo.