Perfil empresarial Inversión

China interesada en zonas rurales ticas

San Carlos, Puntarenas y Limón, entre las opciones

Ingenieros del Banco de Desarrollo de China de encuentran explorando en el país para invertir en una Zona Económica Especial.
Esta misión mantiene reuniones en San Carlos y Puntarenas, y sesiones de trabajo en San José con representantes de Cartago, Limón y

Guanacaste, donde posiblemente se pueda construir esta Zona.
Eso permitiría a China montar y terminar sus productos en Costa Rica, para exportar sin aranceles a los países con los que nuestro país tiene Tratados de Libre Comercio, como toda Norteamérica, Centroamérica y parte de Suramérica.
El proyecto se inspira en el modelo ya implantado en la ciudad de Suzhou y prevé que en la futura zona industrial podrían invertir firmas chinas de tecnología, energías renovables, electrónica, automoción o aeronáutica.
Con la instalación de un parque industrial para empresas, Costa Rica quiere canalizar la inversión china y convertirse en una plataforma para que estas compañías exporten hacia otros mercados, como el asiático.
La relación comercial entre los dos países se ha multiplicado por diez en los últimos años, pero para autoridades del Gobierno todavía se tiene un potencial de crecimiento mucho mayor, por lo que es necesario generar esa relación de cercanía entre los empresarios de ambos países.
“El establecimiento de este tipo de zonas económicas permite crear las condiciones necesarias para que las compañías chinas aprovechen la plataforma comercial que Costa Rica ofrece para manufacturar bienes y exportarlos a mercados como Estados Unidos, el Caribe, el resto de Centroamérica y América del Sur”, dijo Anabel González, ministra de Comex.
Una de las ventajas de esta zonas es que permiten generar empleos en provincias donde cuesta obtenerlo, y donde para los habitantes de estos lugares es muy difícil subsistir.
Pero también hay desventajas.
“Una de las mayores desventajas es que se debe tener cuidado con las normas de origen de los productos importados que vengan de ese país asiático, además saber qué proporción de componente nacional van a tener esos productos, ya que si se va a utilizar el nombre de Costa Rica, el país deberá asumir los errores del fabricante”, explicó Adrián Moya, analista de Comercio Exterior.

Raquel Rodríguez
rrodriguez@larepublica.net