Transformar

Durante mi recorrido en donde he apoyado al sector emprendedor y ante estos nuevos retos que se enfrentan, mi consejo ha sido que evolucionen, que no le teman al cambio y que reinventarse es un proceso natural de la vida misma y no solo de los negocios.

El emprendedor tiene que tener una iniciativa dónde lo motive a crear un negocio productivo y sustentable, pero, además, que conozca el mercado, para propiciar las soluciones a las necesidades de sus clientes potenciales, con una mira innovadora, característico de los emprendedores que he conocido.

Hoy más que nunca el emprendedor debe asumir un liderazgo fuerte ante estos cambios vertiginosos, se requiere una mentalidad de empresario, de empoderamiento para creérsela y seguir avanzando.

¿Todos los emprendedores son empresarios?

Esta transformación no debe suponer perder los valores del emprendedor. En muchas ocasiones se pone especial empeño en todo el proceso de puesta en marcha de la empresa y una vez conseguido se cree que todo va a ir rodado, pero emprender es sólo el comienzo y lo complejo viene después. Ante esto, una vez logrado ese primer objetivo, no se puede dejar llevar por la inercia, sino que se debe prestar más énfasis en evolucionar, adaptar e innovar nuestros procesos o servicios.

El empresario debe mantener este espíritu emprendedor que le servirá para mantener la iniciativa, la creatividad, ese impulso para seguir buscando nuevas oportunidades de negocio, analizando a la competencia y depurando errores.

Debemos por tanto, ser primero emprendedores y comportarse como empresarios y más tarde, empresarios con espíritu emprendedor.