Señores candidatos
| Miércoles 30 octubre, 2013
Esto, señores candidatos, es lo que verdaderamente me interesa y sobre eso es que tomaré mi decisión de votar por alguno de ustedes
Señores candidatos
Debo ser muy sincero en cuanto a que, al día de hoy, no he decidido por cuál de ustedes votar. Lo único que sí tengo claro es que, como corresponde, ejerceré mi derecho constitucional y estaré, el primer domingo de febrero, formando parte de una etapa más de nuestra democracia.
No me importa, ni me interesa, si conocen cuánto vale un cartón de leche, un casado y un pasaje de bus. Tampoco si conocen (o son aficionados a) cuál equipo de fútbol es líder en el Campeonato Nacional. Todos sabemos que la electricidad está carísima en Costa Rica, y hacemos ingentes esfuerzos por bajar un poco esa factura mensual sin afectar nuestro nivel de vida y lo que importa es que el servicio de recolección de basura pase, no cuándo.
Me interesa más que me digan cómo van a resolver, y en qué plazo, el asunto del déficit fiscal que, por más advertencias que nos han hecho autoridades locales e internacionales, sigue siendo un tema olvidado en las agendas políticas, nacionales y gubernamentales de Costa Rica. Seguimos siendo un potencial Grecia y el país en general, con la estupidez de que somos los más felices del mundo, se hace la vista gorda.
También me interesa saber qué medidas iniciales se van a tomar para revertir el retroceso tan enorme y palpable que tenemos en infraestructura, tanto vial como portuaria (aérea y marítima). En cuatro años no lo van a resolver todo, y eso lo tengo claro, pero sí debieran, al menos, dejar montado un Proyecto País para 10, 15 o 20 años en este sentido.
Si son necesarios los impuestos, quiero que me expliquen por qué. Y, si me convencen, quiero que me digan qué sacrificio van a estar dispuestos ustedes a hacer a cambio del mío. Al pagar más impuestos, evidentemente mis ingresos se verán reducidos. Quiero, de igual manera, que sus gastos como Gobierno también se reduzcan o, como mínimo, se hagan eficientes.
Si no son necesarios los impuestos, también quiero que me expliquen por qué. Quiero saber cómo van a hacer chocolate sin cacao, como dice el popular refrán, o, en su defecto, de dónde van a obtener los recursos (y, por favor, que no sea más mendigando o pidiendo préstamos blandos) para los dos primeros puntos que les solicité líneas arriba.
¿El tema de la CCSS? También me interesa. Quiero saber cómo van a resolver los problemas de las filas, de los biombos, de la falta de humanismo que se ha apoderado de la institución, el pésimo servicio, las instalaciones, los equipos. Quiero también saber qué va a pasar con mi pensión dentro de veinte años.
Finalmente, y por razones de espacio hasta aquí llegan mis inquietudes, quiero saber qué oportunidades les van a quedar a mis hijos. No solamente las laborales, tan importantes, sino las de desarrollarse plenamente como personas, sin miedo a ser asaltados en cualquier esquina, sin miedo a que los alcance una bala perdida, sin temor de ser.
Esto, señores candidatos, es lo que verdaderamente me interesa y sobre eso es que tomaré mi decisión de votar por alguno de ustedes.
Marcello Pignataro