Reubicación por lesiones laborales
| Sábado 02 febrero, 2008
Reubicación por lesiones laborales
No son pocos los casos de personas que sufren alguna lesión en el ejercicio de su trabajo. Muchos de estos casos se dan por concluidos luego de que el trabajador es reubicado a raíz de una recomendación médica.
Lejos de ser este el fin del proceso, las organizaciones tienen grandes dificultades para recolocar a estos trabajadores. En numerosas ocasiones terminan en puestos sin riesgos pero sin relevancia o interés para el trabajador y la misma organización.
Lo anterior es importante pues estos trabajadores, luego de pasar por el duelo de perder un puesto y sobre todo, de perder la capacidad de ejecutarlo; son doblemente castigados cuando se trasladan a trabajos “meramente decorativos”, pues implícitamente se les cataloga como incompetentes, consecuentemente se desmotivan y pierden interés por el ejercicio de sus funciones.
Asimismo, la lección es captada por los demás trabajadores, que ven en la experiencia de su compañero un aviso de lo que puede ocurrir en futuras ocasiones y esto trae consecuencias negativas para el clima laboral.
Un abordaje integral debe considerar todas las dimensiones de la persona, pues si nos quedamos únicamente con la perspectiva fisiológica, quizá encontremos una solución sencilla, pero equivocada.
Así como quitar el aire acaba una crisis de angustia, pero mata al paciente, algunas soluciones desde lo fisiológico, pueden ser fatales para la compañía si no contemplan la parte psicológica de las personas.
Rafael León Hernández
Psicólogo
Cédula 1-1034-0993
No son pocos los casos de personas que sufren alguna lesión en el ejercicio de su trabajo. Muchos de estos casos se dan por concluidos luego de que el trabajador es reubicado a raíz de una recomendación médica.
Lejos de ser este el fin del proceso, las organizaciones tienen grandes dificultades para recolocar a estos trabajadores. En numerosas ocasiones terminan en puestos sin riesgos pero sin relevancia o interés para el trabajador y la misma organización.
Lo anterior es importante pues estos trabajadores, luego de pasar por el duelo de perder un puesto y sobre todo, de perder la capacidad de ejecutarlo; son doblemente castigados cuando se trasladan a trabajos “meramente decorativos”, pues implícitamente se les cataloga como incompetentes, consecuentemente se desmotivan y pierden interés por el ejercicio de sus funciones.
Asimismo, la lección es captada por los demás trabajadores, que ven en la experiencia de su compañero un aviso de lo que puede ocurrir en futuras ocasiones y esto trae consecuencias negativas para el clima laboral.
Un abordaje integral debe considerar todas las dimensiones de la persona, pues si nos quedamos únicamente con la perspectiva fisiológica, quizá encontremos una solución sencilla, pero equivocada.
Así como quitar el aire acaba una crisis de angustia, pero mata al paciente, algunas soluciones desde lo fisiológico, pueden ser fatales para la compañía si no contemplan la parte psicológica de las personas.
Rafael León Hernández
Psicólogo
Cédula 1-1034-0993