Ni corriendo desnudo asegura Maradona triunfo de los Kirchner
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 03 julio, 2010
Ni corriendo desnudo asegura Maradona triunfo de los Kirchner
Ganar la Copa del Mundo de fútbol significaría para Argentina algo más que su tercer título mundial y que Diego Maradona salga a correr desnudo por las calles de Buenos Aires. Como el año próximo hay elecciones en el país, el triunfo podría aumentar la popularidad de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, temporariamente.
“Hay un fuerte nexo entre la política y el fútbol”, dijo Rosendo Fraga, analista político que dirige Nueva Mayoría, una compañía encuestadora de Buenos Aires. “Ganar un Mundial tiene efectos políticos, pero estos duran poco, semanas, a lo sumo meses”.
Maradona, que como jugador condujo a Argentina a su segundo título mundial en 1986, está superando las críticas sobre su capacidad como director técnico que manifestaron diarios porteños como La Nación y Olé. Aunque Argentina apenas se calificó para el torneo, avanzó lo suficiente como para jugar contra Alemania en los cuartos de final de este sábado. Si el equipo gana la Copa, prometió Maradona en una entrevista transmitida por Radio Metro en mayo, correrá desnudo por el centro de la ciudad de Buenos Aires.
Fernández, de 57 años, y su esposo y predecesor Néstor Kirchner, de 60, podrían tener más dificultades para sobrevivir a las críticas a sus políticas, que desaceleraron la inversión y dispararon la inflación por encima del 20%. Los inversores que apuestan a un cambio de Gobierno no tienen necesidad de preocuparse de que un aumento de la popularidad después de la Copa del Mundo dure lo suficiente como para que uno de los Kirchner gane las elecciones en 2011, dijo Siobhan Morden, estratega de deuda en RBS Securities Inc. en Stamford, estado de Connecticut.
“Uno puede tener espasmos de patriotismo, como los tuvo para el bicentenario, pero eso no los llevará” a la reelección, dijo Morden esta semana en una entrevista telefónica. En mayo, Argentina celebró el segundo centenario de la revolución que liberó al país del régimen español.
Fernández ha tomado medidas para que los argentinos vean su deporte favorito. En los meses anteriores a la Copa del Mundo, regaló casi 1,2 millones de decodificadores para la televisión por cable de manera de brindar acceso a la cobertura de alta definición de los partidos en los canales gubernamentales gratuitos.
El año pasado obtuvo los derechos televisivos para transmitir los encuentros de la Asociación del Fútbol Argentino gratis después que la liga rompió un contrato existente con los proveedores de cable.
“Hemos dado un paso grande en la democratización de la sociedad argentina”, dijo en una ceremonia Fernández en agosto pasado junto a Maradona, que tiene 49 años. Y comparó los partidos de fútbol que hay que pagar para ver con “secuestrar” los goles, como se secuestró durante la dictadura militar de siete años iniciada en 1976.
“No es posible que solamente el que pueda pagar pueda mirar un partido de fútbol, que además le secuestren los goles hasta el domingo aunque pagues igual, como te secuestran la palabra o te secuestran las imágenes, como antes secuestraron y desaparecieron a 30 mil argentinos”, dijo entonces la presidenta.
Buenos Aires
Ganar la Copa del Mundo de fútbol significaría para Argentina algo más que su tercer título mundial y que Diego Maradona salga a correr desnudo por las calles de Buenos Aires. Como el año próximo hay elecciones en el país, el triunfo podría aumentar la popularidad de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, temporariamente.“Hay un fuerte nexo entre la política y el fútbol”, dijo Rosendo Fraga, analista político que dirige Nueva Mayoría, una compañía encuestadora de Buenos Aires. “Ganar un Mundial tiene efectos políticos, pero estos duran poco, semanas, a lo sumo meses”.
Maradona, que como jugador condujo a Argentina a su segundo título mundial en 1986, está superando las críticas sobre su capacidad como director técnico que manifestaron diarios porteños como La Nación y Olé. Aunque Argentina apenas se calificó para el torneo, avanzó lo suficiente como para jugar contra Alemania en los cuartos de final de este sábado. Si el equipo gana la Copa, prometió Maradona en una entrevista transmitida por Radio Metro en mayo, correrá desnudo por el centro de la ciudad de Buenos Aires.
Fernández, de 57 años, y su esposo y predecesor Néstor Kirchner, de 60, podrían tener más dificultades para sobrevivir a las críticas a sus políticas, que desaceleraron la inversión y dispararon la inflación por encima del 20%. Los inversores que apuestan a un cambio de Gobierno no tienen necesidad de preocuparse de que un aumento de la popularidad después de la Copa del Mundo dure lo suficiente como para que uno de los Kirchner gane las elecciones en 2011, dijo Siobhan Morden, estratega de deuda en RBS Securities Inc. en Stamford, estado de Connecticut.
“Uno puede tener espasmos de patriotismo, como los tuvo para el bicentenario, pero eso no los llevará” a la reelección, dijo Morden esta semana en una entrevista telefónica. En mayo, Argentina celebró el segundo centenario de la revolución que liberó al país del régimen español.
Fernández ha tomado medidas para que los argentinos vean su deporte favorito. En los meses anteriores a la Copa del Mundo, regaló casi 1,2 millones de decodificadores para la televisión por cable de manera de brindar acceso a la cobertura de alta definición de los partidos en los canales gubernamentales gratuitos.
El año pasado obtuvo los derechos televisivos para transmitir los encuentros de la Asociación del Fútbol Argentino gratis después que la liga rompió un contrato existente con los proveedores de cable.
“Hemos dado un paso grande en la democratización de la sociedad argentina”, dijo en una ceremonia Fernández en agosto pasado junto a Maradona, que tiene 49 años. Y comparó los partidos de fútbol que hay que pagar para ver con “secuestrar” los goles, como se secuestró durante la dictadura militar de siete años iniciada en 1976.
“No es posible que solamente el que pueda pagar pueda mirar un partido de fútbol, que además le secuestren los goles hasta el domingo aunque pagues igual, como te secuestran la palabra o te secuestran las imágenes, como antes secuestraron y desaparecieron a 30 mil argentinos”, dijo entonces la presidenta.
Buenos Aires