Mercados internacionales tiemblan
| Martes 22 enero, 2008
Gobiernos salen a tranquilizar a los inversores
Mercados internacionales tiemblan
Las bolsas internacionales bajan 5% por miedo a la recesión en Estados Unidos
Sao Paulo
EFE
Las bolsas latinoamericanas, sin el referente de Wall Street, sintieron ayer el desplome de los mercados asiáticos y europeos por el pesimismo internacional con la economía estadounidense, que hace prever una semana difícil para la región.
Las caídas fueron de tal magnitud que varios Gobiernos, como el brasileño y el chileno, salieron a tranquilizar a los inversores y a reiterar que sus países tienen sólidos fundamentos económicos para resistir mejor que hace unos años una crisis internacional.
“No tenemos ninguna razón para estar preocupados”, dijo el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien sin embargo reconoció que la crisis actual no excluye a su país de estar “atento” al desempeño de la economía estadounidense.
Todas las plazas latinoamericanas se desplomaron ayer arrastradas por las asiáticas y europeas, que dejaron ver de una vez por todas su temor a una recesión en Estados Unidos, cuyos mercados no operaron este lunes por la festividad de Martin Luther King.
En Chile, donde el IPSA de la Bolsa de Comercio de Santiago perdió el 5,03%, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, también salió a “calmar las aguas”.
“Aquí tenemos fundamentos muy sólidos y ciertamente eso nos llama a poder estar con tranquilidad, pero obviamente muy atentos”, dijo Velasco.
“Estamos viviendo en este planeta pequeño, cada día más integrado financieramente, una situación de volatilidad como no habíamos visto en meses así”, añadió el responsable de las finanzas chilenas.
Pese a la confianza que los Gobiernos han intentado transmitir a los mercados, los analistas advirtieron de que el panorama de la economía estadounidense y mundial puede complicarse más.
En Argentina, donde el índice Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cayó el 6,27%, el analista Jorge Compagnucci apuntó que el revés de Buenos Aires y otras plazas “es el comienzo de un ciclo de problemas en las bolsas que van a tener un serio impacto en la economía de los Estados Unidos”.
El experto sostuvo que Argentina “va a sentir los coletazos” porque el menor crecimiento “va a llevar como correlato una caída en los precios de las materias primas”, situación que también afrontan Brasil, México, Perú y otros países latinoamericanos.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró también ayer la peor caída del año con un retroceso del 5,35% del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC).
El director de análisis del Grupo Financiero Ixe, Carlos Ponce, dijo a Efe que el desastre bursátil está relacionado con la “creciente percepción de un menor desempeño en la economía estadounidense”.
Añadió que aunque algunos expertos coinciden en que la posible recesión podría pasar de manera rápida con unos dos trimestres negativos, “los inversores están preocupados por la profundidad y el contagio de un menor crecimiento”.
La volatilidad internacional también dejó en la lona a los mercados de Lima, Colombia, Caracas y Montevideo.
Después de estas caídas, los analistas están atentos a la reacción que tendrá hoy Wall Street al iniciar las operaciones de la semana, y cuyo desempeño puede ser determinante para el rumbo de los negocios en los próximos días.
Por la mala acogida dada al plan fiscal presentado el pasado viernes por el presidente estadounidense, George Bush, Tokio cedía el 3,86%, afectada también por la caída de las empresas exportadoras, de materias primas y el sector financiero.
Por su parte, y también en previsión de que la economía estadounidense reduzca su capacidad importadora, Hong Kong bajaba el 5,49% y la bolsa de Bombay el 7,4%.
El descalabro de los mercados seguía por Europa. El índice español Ibex-35 lideraba las pérdidas entre las bolsas del Viejo Continente al acabar la novena sesión consecutiva de pérdidas con el tercer mayor descenso de su historia, el 7,54%.
Esta caída sólo fue superada por el 7,76% del 21 de octubre de 1987 -dos días después del “lunes negro” en Wall Street- y el 8,41% del 19 de agosto de 1991 -golpe de estado en Rusia-.
Así, liderado por Iberdrola, que cedió el 12,58%, y con un sólo valor con ganancias, Inmobiliaria Colonial, el 1,33%, el Ibex, acumula en lo que va de año unas pérdidas del 16,8% y se sitúa en niveles de septiembre de 2006.
Las plazas europeas, que ignoraban los resultados de Philips y la contención de los precios de producción alemanes, preferían observar la reacción al plan de Bush, que tendrá que aprobar el Congreso estadounidense y que tardará en tener efectos reales y que Wall Street acogió el pasado viernes con una caída del 0,5%.
Además, los inversores europeos recibían malas noticias sobre el sector financiero -rumores sobre provisiones que debería destinar Societe Generale por la deuda hipotecaria de alto riesgo o los 2.000 millones que consignará el banco West LB- y comentarios sobre el descenso de la actividad en la zona euro, como señaló el consejero del Banco Central Europeo (BCE) Nout Wellink.
Así, mientras se asistía a la depreciación del euro, que bajaba más de un céntimo y cotizaba a 1,444 dólares en espera de un menor crecimiento en Europa por el parón de la actividad estadounidense, Fráncfort cedió el 7,16%, su peor resultado desde el 11-S; París, el 6,83%; Londres, el 5,48% y Milán, el 5,17%.
En Europa, los valores que más bajaron al cierre de la negociación fueron las aseguradoras (-8,4%), las compañías del sector de materias primas (-7,9%), las empresas de servicios públicos (-7,9%), las químicas (-7,4%) y los bancos (7,3%).
Mercados internacionales tiemblan
Las bolsas internacionales bajan 5% por miedo a la recesión en Estados Unidos
Sao Paulo
EFE
Las bolsas latinoamericanas, sin el referente de Wall Street, sintieron ayer el desplome de los mercados asiáticos y europeos por el pesimismo internacional con la economía estadounidense, que hace prever una semana difícil para la región.
Las caídas fueron de tal magnitud que varios Gobiernos, como el brasileño y el chileno, salieron a tranquilizar a los inversores y a reiterar que sus países tienen sólidos fundamentos económicos para resistir mejor que hace unos años una crisis internacional.
“No tenemos ninguna razón para estar preocupados”, dijo el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien sin embargo reconoció que la crisis actual no excluye a su país de estar “atento” al desempeño de la economía estadounidense.
Todas las plazas latinoamericanas se desplomaron ayer arrastradas por las asiáticas y europeas, que dejaron ver de una vez por todas su temor a una recesión en Estados Unidos, cuyos mercados no operaron este lunes por la festividad de Martin Luther King.
En Chile, donde el IPSA de la Bolsa de Comercio de Santiago perdió el 5,03%, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, también salió a “calmar las aguas”.
“Aquí tenemos fundamentos muy sólidos y ciertamente eso nos llama a poder estar con tranquilidad, pero obviamente muy atentos”, dijo Velasco.
“Estamos viviendo en este planeta pequeño, cada día más integrado financieramente, una situación de volatilidad como no habíamos visto en meses así”, añadió el responsable de las finanzas chilenas.
Pese a la confianza que los Gobiernos han intentado transmitir a los mercados, los analistas advirtieron de que el panorama de la economía estadounidense y mundial puede complicarse más.
En Argentina, donde el índice Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cayó el 6,27%, el analista Jorge Compagnucci apuntó que el revés de Buenos Aires y otras plazas “es el comienzo de un ciclo de problemas en las bolsas que van a tener un serio impacto en la economía de los Estados Unidos”.
El experto sostuvo que Argentina “va a sentir los coletazos” porque el menor crecimiento “va a llevar como correlato una caída en los precios de las materias primas”, situación que también afrontan Brasil, México, Perú y otros países latinoamericanos.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró también ayer la peor caída del año con un retroceso del 5,35% del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC).
El director de análisis del Grupo Financiero Ixe, Carlos Ponce, dijo a Efe que el desastre bursátil está relacionado con la “creciente percepción de un menor desempeño en la economía estadounidense”.
Añadió que aunque algunos expertos coinciden en que la posible recesión podría pasar de manera rápida con unos dos trimestres negativos, “los inversores están preocupados por la profundidad y el contagio de un menor crecimiento”.
La volatilidad internacional también dejó en la lona a los mercados de Lima, Colombia, Caracas y Montevideo.
Después de estas caídas, los analistas están atentos a la reacción que tendrá hoy Wall Street al iniciar las operaciones de la semana, y cuyo desempeño puede ser determinante para el rumbo de los negocios en los próximos días.
Por la mala acogida dada al plan fiscal presentado el pasado viernes por el presidente estadounidense, George Bush, Tokio cedía el 3,86%, afectada también por la caída de las empresas exportadoras, de materias primas y el sector financiero.
Por su parte, y también en previsión de que la economía estadounidense reduzca su capacidad importadora, Hong Kong bajaba el 5,49% y la bolsa de Bombay el 7,4%.
El descalabro de los mercados seguía por Europa. El índice español Ibex-35 lideraba las pérdidas entre las bolsas del Viejo Continente al acabar la novena sesión consecutiva de pérdidas con el tercer mayor descenso de su historia, el 7,54%.
Esta caída sólo fue superada por el 7,76% del 21 de octubre de 1987 -dos días después del “lunes negro” en Wall Street- y el 8,41% del 19 de agosto de 1991 -golpe de estado en Rusia-.
Así, liderado por Iberdrola, que cedió el 12,58%, y con un sólo valor con ganancias, Inmobiliaria Colonial, el 1,33%, el Ibex, acumula en lo que va de año unas pérdidas del 16,8% y se sitúa en niveles de septiembre de 2006.
Las plazas europeas, que ignoraban los resultados de Philips y la contención de los precios de producción alemanes, preferían observar la reacción al plan de Bush, que tendrá que aprobar el Congreso estadounidense y que tardará en tener efectos reales y que Wall Street acogió el pasado viernes con una caída del 0,5%.
Además, los inversores europeos recibían malas noticias sobre el sector financiero -rumores sobre provisiones que debería destinar Societe Generale por la deuda hipotecaria de alto riesgo o los 2.000 millones que consignará el banco West LB- y comentarios sobre el descenso de la actividad en la zona euro, como señaló el consejero del Banco Central Europeo (BCE) Nout Wellink.
Así, mientras se asistía a la depreciación del euro, que bajaba más de un céntimo y cotizaba a 1,444 dólares en espera de un menor crecimiento en Europa por el parón de la actividad estadounidense, Fráncfort cedió el 7,16%, su peor resultado desde el 11-S; París, el 6,83%; Londres, el 5,48% y Milán, el 5,17%.
En Europa, los valores que más bajaron al cierre de la negociación fueron las aseguradoras (-8,4%), las compañías del sector de materias primas (-7,9%), las empresas de servicios públicos (-7,9%), las químicas (-7,4%) y los bancos (7,3%).