El comercio de madera en bruto hacia el exterior incrementó en nuestro país más de un 200% en los últimos tres años

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Industria que crece

La antigua costumbre de construir casas de madera, quizás ha dejado de ser cosa del pasado. De hecho ya hay muchos que las prefieren construidas con ese material porque son de bajo costo y hay quienes dicen que son más resistentes que el hormigón. Pero además es un tipo de construcción sostenible.
De todos modos, lo que ocurre en Costa Rica pone en evidencia que, para los fines que sea, la madera se está utilizando mucho en el mundo. Su propia naturaleza hace que la consideren, para diversos fines, un material que además de su belleza y otras ventajas tiene bajo impacto ambiental.
El comercio de madera en bruto hacia el exterior incrementó en nuestro país más de un 200% en los últimos tres años, repunte incentivado principalmente por el mercado asiático, según una nota de este medio.
No obstante, hasta el momento la madera se exporta desde Costa Rica como materia prima, ya que, según explican quienes se dedican a ese negocio, son altos los costos de su procesamiento.
Pero el sector exportador de madera en bruto se fortalece más cada año por lo que bien puede ser una oportunidad para nuevos negocios.
Quienes más importan nuestras maderas por ahora son Estados Unidos, India y Singapur por tener la capacidad de procesarla. Pero también China u otras naciones las usan no solo para construcción sino para artesanías y otros productos de alto consumo.
En definitiva, una industria en crecimiento.
Sin embargo, a futuro podría crecer más el negocio del procesamiento de la madera, especialmente la teca certificada, por ejemplo, encontrando formas de ser competitivos.
Este tipo de madera (teca) en determinado momento, hace años, cambió la condición de suelos en Guanacaste, que estaban muy deteriorados y los convirtió en zona de arboledas en donde son siempre más los árboles que se siembran que los que se cortan.
Esto además de ser plantaciones certificadas, cuyos productos, como sabemos, son los más buscados por países que prefieren consumir materias primas sostenibles.
Lo ideal probablemente sería que el país pudiera incursionar en algún momento, ya no solo en la exportación de la madera en bruto, sino también de la procesada.