RETO FISCAL
Sencillez de recolección versus regresividad

Impuesto único solución a burocracia tributaria

Un "flat tax" debería ser acompañado de políticas de reembolso para pobres

Cambiar todas las tasas de impuesto diferenciadas que existen para gravar renta en el país por un impuesto único, conocido como "Flat Tax" daría al fisco una enorme facilidad de recolección y a los contribuyentes una reducción en el tiempo y dinero que gastan haciendo su declaración.

Muchos países, sobre todo de Europa del Este han puesto de moda el uso de este esquema que tiene un menor costo de administración, existen pocos estímulos para evadirlo o hacer planificación fiscal aprovechando portillos que solo unos pocos pueden aprovecha.
Expertos del instituto Cato explican además que como supone eliminar exenciones y variados regímenes de tributación, amplía la base tributaria, por lo que las tasas que se apliquen podrían ser menores, por lo anterior tampoco motiva la salida de capitales.
En el mundo este impuesto ronda en promedio un 10% de las utilidades, pero este porcentaje varía desde el 3% hasta el 37%.
No obstante, el principal problema de este impuesto es su regresividad ya que todos pagan el mismo impuesto sin importar si los ingresos son altos o bajos, por lo que para la gente pobre es un esquema nocivo.
Es por ello que los países que lo implementan deben hacer una mejora en la redistribución de lo recolectado. Por ejemplo, en Canadá se dan reembolsos en las comparas de la canasta básica para personas pobres. Otra opción es la mejora en los servicios públicos como la educación para los barrios marginales para que la gente aprecie los beneficios de pagar impuestos.
En Costa Rica, organizaciones económicas académicas como ANFE han estado impulsando este tipo de impuestos, sin mayor éxito. Por lo que se podría decir que lograr un sistema de "flat tax" es muy difícil. Pero sí se podría pensar en uniformar las diferentes tasas y exenciones del sistema para así eliminar los portillos donde solo unos pocos pueden evadir los pagos al fisco.
Si se hiciera algo así se contribuiría a mejorar el complicado sistema actual que es tan completo que cumplir con la tarea de pagar impuestos cuesta casi 2% del Producto Interno Bruto, dinero del cual casi la totalidad son gastos de tiempo y asesorías pagadas por los contribuyentes.