Los resultados de una planificación seria, protegida de mandatos políticos, serían uno de los mayores logros que la administración Solís Rivera podría tener

Estructura de planificación: ¡El gran logro!

Este gobierno ha logrado avances en temas de infraestructura y cabe reconocérselo. Podemos enumerar algunas victorias que vendrán a mejorar algunos rezagos en infraestructura vial y a impulsar algunos sectores de la economía. Sin embargo, estos avances en realidad solo resuelven necesidades actuales, y el epicentro de las falencias en infraestructura de este país se centra en la planificación. El verdadero logro en temas de infraestructura sería la re-estructuración de la planificación. Ahí es donde debe enfocarse este gobierno.
La clave del desarrollo está en lograr que se definan prioridades, evaluar y estructurar los proyectos, obteniendo la información de los proyectos que se necesita para determinar la mejor forma de realizarlos. Es necesario tener una estructura que coordine y evalúe proyectos, decida si son bancables o no y si el proyecto puede beneficiarse de la participación privada.
La estructura actual está enfocada en desarrollar proyectos sin que estos obedezcan a la ejecución de un plan nacional de infraestructura que supere ciclos electorales. En cuanto a infraestructura vial, el Plan Nacional de Transportes de Costa Rica 2011-2035 es solamente un inicio que detalla una hoja de ruta pero que debe ampliarse para convertirlo en un documento que refleje planificación a largo plazo con detalle de cuáles son las prioridades y la mejor manera de hacerlas.
Entonces, aterrizando a la realidad que confrontamos, el Gobierno debería enfocar esfuerzos en reestructurar las entidades encargadas de planificar y priorizar. Claramente, estos esfuerzos no rendirán frutos en esta administración, pero los resultados de una planificación seria, protegida de mandatos políticos, serían uno de los mayores logros que la administración Solís Rivera podría tener.
De igual manera, resulta vital que el sector público vea al sector privado como un aliado necesario para fortalecerse en esta función de planificación.
El nuevo Ministro de Obras Públicas y Transportes deberá concentrarse en apoyar iniciativas tendientes a estructurar los procesos de selección, evaluación y ejecución de proyectos. El Mideplan y el Ministerio de Hacienda tendrán un rol vital en definir las prioridades y apoyar las iniciativas que otras instituciones del Estado tengan. Es hora de modernizar procesos. Costa Rica necesita trazar los planos de las necesidades de infraestructura de salud, educación, vial, portuaria, aeroportuaria, acueducto y alcantarillados.
Una estructura dedicada a asistir en la planificación y ejecución de proyectos sería uno de los mayores logros de esta administración.

Carlos F. Camacho
Socio Arias & Muñoz