Empresarios de EE.UU contra plan sobre indocumentados
| Lunes 29 octubre, 2007
Empresarios de EE.UU contra plan sobre indocumentados
Washington
Las grandes empresas de Estados Unidos están amenazando torpedear un plan del Gobierno del presidente George W. Bush que las obligaría a buscar los inmigrantes indocumentados que pueda haber en sus plantillas, usando bancos de datos federales.
La Cámara de Comercio de Estados Unidos, el mayor grupo de cabildeo empresarial del país, critica la propuesta del Departamento de Seguridad Interna de expandir E-Verify, su programa para verificar la condición migratoria de los nuevos empleados, a todas las compañías que tengan contratos con el Gobierno federal. Los críticos arguyen entre otras cosas que los bancos de datos que usa el sistema no son confiables.
Grupos empresariales, así como la American Civil Liberties Union y activistas de derechos de inmigrantes, ya están cuestionando el programa ante la justicia. La oposición es similar a un intento que bloqueó un plan que obligaba a los empleadores a verificar números falsos del Seguro Social. Si el litigio prospera, podría ser otro revés para la política migratorias de Bush.
El llamamiento de Bush a hacer valer las leyes existentes “no es viable”, dijo Doris Meissner, comisaria del Servicio de Inmigración y Naturalización durante la presidencia de Bill Clinton.
Alrededor de 29 mil compañías y organizaciones usan E- Verify en la actualidad, menos de 1% de las 6 millones de empresas que hay en Estados Unidos. No hay un calendario aún para extender el sistema a los contratistas federales. Los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, que administran el programa E-Verify, están preparando una regla para su comentario público a comienzos del año próximo.
Para usar el sistema, las compañías se conectan a un sitio gubernamental en Internet y anotan la información personal que dan los empleados. El sistema hace un examen cruzado de la información con los bancos de datos de la Seguridad Social y del Departamento de Seguridad Interna. Alrededor de 8% de los nombres reciben marcas de alerta por violaciones potenciales de la ley de inmigración.
En junio, el Senado votó contra un proyecto de ley respaldado por Bush por el cual se buscaba dar a algunos de los 12 millones de inmigrantes que entraron en Estados Unidos ilegalmente una vía hacia la naturalización mediante un programa de trabajadores temporarios. Bush, quien fue obligado a replegarse tras una revuelta en las filas republicanas, desde entonces ha procurado aplicar con mayor rigor las leyes de inmigración vigentes.
El presidente le ha dado al secretario de Seguridad Interna, Michael Chertoff, amplia latitud para intensificar la aplicación de la ley, dijo Mark Krikorian, director ejecutivo del Center for Immigration Studies, un grupo con sede en Washington que es partidario de controles fronterizos más estrictos.
“Parece que en los últimos meses le ha dado más rienda a Chertoff” , dijo Krikorian.
Algunas compañías están usando E-Verify de manera voluntaria, entre ellas Hilton Hotels Corp., Dunkin' Donuts Inc. y Cargill Inc.
Los estados de Oklahoma, Arizona, Idaho, Georgia, Tennessee y Colorado, como también dos municipalidades en Carolina del Sur y California, han adoptado leyes que obligan o alientan a las empresas a adoptar el sistema. El Arizona Contractors Association y el Arizona Employers for Immigration Reform contraatacaron, demandando al estado por su estatuto del E- Verify. Los activistas a favor de los inmigrantes también han presentado querellas para revertir las leyes de Arizona y Oklahoma.
Las causas de Arizona se consolidaron el mes pasado y el juicio comenzará el 14 de noviembre. El juez federal de distrito James Payne desestimó inicialmente la querella de Oklahoma porque dijo que los demandantes no habían demostrado que hubieran sido perjudicados por la ley, que entra en vigor el mes próximo.
Payne ha programado una audiencia para el 31 de octubre sobre una nueva moción de los partidarios de los inmigrantes para bloquear la ley.
Washington
Las grandes empresas de Estados Unidos están amenazando torpedear un plan del Gobierno del presidente George W. Bush que las obligaría a buscar los inmigrantes indocumentados que pueda haber en sus plantillas, usando bancos de datos federales.
La Cámara de Comercio de Estados Unidos, el mayor grupo de cabildeo empresarial del país, critica la propuesta del Departamento de Seguridad Interna de expandir E-Verify, su programa para verificar la condición migratoria de los nuevos empleados, a todas las compañías que tengan contratos con el Gobierno federal. Los críticos arguyen entre otras cosas que los bancos de datos que usa el sistema no son confiables.
Grupos empresariales, así como la American Civil Liberties Union y activistas de derechos de inmigrantes, ya están cuestionando el programa ante la justicia. La oposición es similar a un intento que bloqueó un plan que obligaba a los empleadores a verificar números falsos del Seguro Social. Si el litigio prospera, podría ser otro revés para la política migratorias de Bush.
El llamamiento de Bush a hacer valer las leyes existentes “no es viable”, dijo Doris Meissner, comisaria del Servicio de Inmigración y Naturalización durante la presidencia de Bill Clinton.
Alrededor de 29 mil compañías y organizaciones usan E- Verify en la actualidad, menos de 1% de las 6 millones de empresas que hay en Estados Unidos. No hay un calendario aún para extender el sistema a los contratistas federales. Los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, que administran el programa E-Verify, están preparando una regla para su comentario público a comienzos del año próximo.
Para usar el sistema, las compañías se conectan a un sitio gubernamental en Internet y anotan la información personal que dan los empleados. El sistema hace un examen cruzado de la información con los bancos de datos de la Seguridad Social y del Departamento de Seguridad Interna. Alrededor de 8% de los nombres reciben marcas de alerta por violaciones potenciales de la ley de inmigración.
En junio, el Senado votó contra un proyecto de ley respaldado por Bush por el cual se buscaba dar a algunos de los 12 millones de inmigrantes que entraron en Estados Unidos ilegalmente una vía hacia la naturalización mediante un programa de trabajadores temporarios. Bush, quien fue obligado a replegarse tras una revuelta en las filas republicanas, desde entonces ha procurado aplicar con mayor rigor las leyes de inmigración vigentes.
El presidente le ha dado al secretario de Seguridad Interna, Michael Chertoff, amplia latitud para intensificar la aplicación de la ley, dijo Mark Krikorian, director ejecutivo del Center for Immigration Studies, un grupo con sede en Washington que es partidario de controles fronterizos más estrictos.
“Parece que en los últimos meses le ha dado más rienda a Chertoff” , dijo Krikorian.
Algunas compañías están usando E-Verify de manera voluntaria, entre ellas Hilton Hotels Corp., Dunkin' Donuts Inc. y Cargill Inc.
Los estados de Oklahoma, Arizona, Idaho, Georgia, Tennessee y Colorado, como también dos municipalidades en Carolina del Sur y California, han adoptado leyes que obligan o alientan a las empresas a adoptar el sistema. El Arizona Contractors Association y el Arizona Employers for Immigration Reform contraatacaron, demandando al estado por su estatuto del E- Verify. Los activistas a favor de los inmigrantes también han presentado querellas para revertir las leyes de Arizona y Oklahoma.
Las causas de Arizona se consolidaron el mes pasado y el juicio comenzará el 14 de noviembre. El juez federal de distrito James Payne desestimó inicialmente la querella de Oklahoma porque dijo que los demandantes no habían demostrado que hubieran sido perjudicados por la ley, que entra en vigor el mes próximo.
Payne ha programado una audiencia para el 31 de octubre sobre una nueva moción de los partidarios de los inmigrantes para bloquear la ley.