Colombianos se levantan contra las FARC
| Martes 05 febrero, 2008
Al menos un millón de personas acudieron a movilización convocada por Internet
Colombianos se levantan contra las FARC
Marchas similares se realizaron en 130 ciudades del mundo, incluyendo la capital costarricense, en solidaridad con los secuestrados
Bogotá
EFE
El rechazo a las FARC y a una de las expresiones más dramáticas del conflicto colombiano, el secuestro, llevó ayer a centenares de miles de personas a las calles de las principales ciudades del país, convocadas por un movimiento surgido en Internet.
Pese a que no se dan cifras oficiales, al menos un millón de ciudadanos se manifestaron en Bogotá, 500 mil más en Medellín e igual número en Cali, según los cálculos divulgados por distintos medios de estos tres principales centros urbanos del país.
Por las calles de Bogotá, ciudades y pueblos del país desfilaron centenares de miles de manifestantes con pancartas en las que se leían frases como “No más FARC”, “No más secuestros”, “No más muertes” y “No más terrorismo”.
Edificios, balcones e incluso grúas de obras de construcción se adornaron con banderas blancas y colombianas, saludando el paso de los manifestantes por las principales avenidas.
Numerosos comercios y oficinas cerraron las puertas poco antes del mediodía para permitir que sus empleados se sumaran a las caminatas.
Los participantes marcharon con camisetas con la leyenda “Colombia soy yo” y algunos de ellos lanzaron racimos de globos blancos en señal de paz, un panorama que se repitió a lo largo y ancho del país.
Algunos ciudadanos donaron miles de claveles blancos para repartir al paso de la caminata por la carrera séptima de Bogotá, que tuvo como aliado al clima, pues el tradicional frío de capital colombiana fue desplazado por una temperatura que superó los 30 grados centígrados.
Desde la ciudad de Valledupar (norte), el presidente colombiano, Álvaro Uribe, agradeció a quienes participaron en las marchas y se unieron en el país y en el exterior a “esta cadena de energía espiritual contra el secuestro y contra el crimen”.
La marcha fue convocada por ciudadanos por medio de la red social Facebook y tuvo acogida en más de 130 ciudades del mundo, en el Gobierno y en prácticamente todos los sectores de la sociedad colombiana.
La propuesta dio lugar al movimiento “Un millón de voces contra las FARC”, con la exigencia de que esta guerrilla ponga en libertad a todas las personas que mantiene secuestradas, entre ellas 44 con fines de canje por medio millar de rebeldes presos.
“No más FARC. Hay que actuar unidos”, decía una gigantesca pancarta desplegada en todo lo alto del Capitolio, la sede del Ejecutivo.
Sin embargo, y pesar de los llamamientos para no caer en ello, una levantada por algunos caminantes clamaba: “Chávez, por Piedad, adopte a las FARC y déjenos en paz”.
Era una alusión al presidente venezolano, Hugo Chávez, y a la senadora colombiana Piedad Córdoba, hasta hace dos meses facilitadores de un acuerdo sobre rehenes con los rebeldes y fuertemente criticados en el país por sus posturas favorables hacia ese grupo guerrillero.
Por su parte, el esposo de la cautiva ex candidata presidencial Ingrid Betancourt dijo a Efe que cree que esta marcha envía a “las FARC el mensaje de que los colombianos -los ricos, los pobres, los de izquierda, los de derecha, los que viven en la ciudad, los que viven en el campo- estamos cansados de la violencia y de la guerra”.
Unos 600 guerrilleros de las FARC presos y arrepentidos también participaron en la jornada de protesta contra la organización rebelde, pidieron “perdón públicamente por el daño” que causaron y se pronunciaron a favor del intercambio humanitario, pero sin que ellos sean incluidos.
“Ha sido una sola jornada contra el secuestro y contra todos los que secuestran, pero con múltiples voces”, dijo a Efe el director de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes), Jorge Rojas.
Codhes está en el grupo de cerca de ochenta formaciones políticas, organizaciones no gubernamentales (ONG), centrales obreras y movimientos sociales que llamaron a una concentración separada, a la que acudieron unas 30.000 personas en la Plaza de Bolívar por discrepancias con la convocatoria contra las FARC.
Rojas dijo que “la diferencia de lo que aquí está ocurriendo es que hay unas personas que marchan contra el secuestro y contra las FARC, pero no proponen soluciones distintas a la guerra, y hay personas que marchamos contra el secuestro y contra las FARC, pero proponemos soluciones humanitarias y políticas”.
El presidente del Polo Democrático Alternativo (PDA), el ex candidato a la jefatura del Estado y ex magistrado Carlos Gaviria, dijo que la formación política salió a la calle con lemas propios, y “se está sumando a un estado emocional de protesta muy importante que hay en el país, pero sin dejarse manipular”.
Colombianos se levantan contra las FARC
Marchas similares se realizaron en 130 ciudades del mundo, incluyendo la capital costarricense, en solidaridad con los secuestrados
Bogotá
EFE
El rechazo a las FARC y a una de las expresiones más dramáticas del conflicto colombiano, el secuestro, llevó ayer a centenares de miles de personas a las calles de las principales ciudades del país, convocadas por un movimiento surgido en Internet.
Pese a que no se dan cifras oficiales, al menos un millón de ciudadanos se manifestaron en Bogotá, 500 mil más en Medellín e igual número en Cali, según los cálculos divulgados por distintos medios de estos tres principales centros urbanos del país.
Por las calles de Bogotá, ciudades y pueblos del país desfilaron centenares de miles de manifestantes con pancartas en las que se leían frases como “No más FARC”, “No más secuestros”, “No más muertes” y “No más terrorismo”.
Edificios, balcones e incluso grúas de obras de construcción se adornaron con banderas blancas y colombianas, saludando el paso de los manifestantes por las principales avenidas.
Numerosos comercios y oficinas cerraron las puertas poco antes del mediodía para permitir que sus empleados se sumaran a las caminatas.
Los participantes marcharon con camisetas con la leyenda “Colombia soy yo” y algunos de ellos lanzaron racimos de globos blancos en señal de paz, un panorama que se repitió a lo largo y ancho del país.
Algunos ciudadanos donaron miles de claveles blancos para repartir al paso de la caminata por la carrera séptima de Bogotá, que tuvo como aliado al clima, pues el tradicional frío de capital colombiana fue desplazado por una temperatura que superó los 30 grados centígrados.
Desde la ciudad de Valledupar (norte), el presidente colombiano, Álvaro Uribe, agradeció a quienes participaron en las marchas y se unieron en el país y en el exterior a “esta cadena de energía espiritual contra el secuestro y contra el crimen”.
La marcha fue convocada por ciudadanos por medio de la red social Facebook y tuvo acogida en más de 130 ciudades del mundo, en el Gobierno y en prácticamente todos los sectores de la sociedad colombiana.
La propuesta dio lugar al movimiento “Un millón de voces contra las FARC”, con la exigencia de que esta guerrilla ponga en libertad a todas las personas que mantiene secuestradas, entre ellas 44 con fines de canje por medio millar de rebeldes presos.
“No más FARC. Hay que actuar unidos”, decía una gigantesca pancarta desplegada en todo lo alto del Capitolio, la sede del Ejecutivo.
Sin embargo, y pesar de los llamamientos para no caer en ello, una levantada por algunos caminantes clamaba: “Chávez, por Piedad, adopte a las FARC y déjenos en paz”.
Era una alusión al presidente venezolano, Hugo Chávez, y a la senadora colombiana Piedad Córdoba, hasta hace dos meses facilitadores de un acuerdo sobre rehenes con los rebeldes y fuertemente criticados en el país por sus posturas favorables hacia ese grupo guerrillero.
Por su parte, el esposo de la cautiva ex candidata presidencial Ingrid Betancourt dijo a Efe que cree que esta marcha envía a “las FARC el mensaje de que los colombianos -los ricos, los pobres, los de izquierda, los de derecha, los que viven en la ciudad, los que viven en el campo- estamos cansados de la violencia y de la guerra”.
Unos 600 guerrilleros de las FARC presos y arrepentidos también participaron en la jornada de protesta contra la organización rebelde, pidieron “perdón públicamente por el daño” que causaron y se pronunciaron a favor del intercambio humanitario, pero sin que ellos sean incluidos.
“Ha sido una sola jornada contra el secuestro y contra todos los que secuestran, pero con múltiples voces”, dijo a Efe el director de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes), Jorge Rojas.
Codhes está en el grupo de cerca de ochenta formaciones políticas, organizaciones no gubernamentales (ONG), centrales obreras y movimientos sociales que llamaron a una concentración separada, a la que acudieron unas 30.000 personas en la Plaza de Bolívar por discrepancias con la convocatoria contra las FARC.
Rojas dijo que “la diferencia de lo que aquí está ocurriendo es que hay unas personas que marchan contra el secuestro y contra las FARC, pero no proponen soluciones distintas a la guerra, y hay personas que marchamos contra el secuestro y contra las FARC, pero proponemos soluciones humanitarias y políticas”.
El presidente del Polo Democrático Alternativo (PDA), el ex candidato a la jefatura del Estado y ex magistrado Carlos Gaviria, dijo que la formación política salió a la calle con lemas propios, y “se está sumando a un estado emocional de protesta muy importante que hay en el país, pero sin dejarse manipular”.