Colapso inmobiliario en EE.UU. inquieta al FMI
| Martes 29 julio, 2008
Colapso inmobiliario en EE.UU. inquieta al FMI
Washington- El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que no se sabe cuándo colapsará el mercado de la vivienda en Estados Unidos y advirtió que el deterioro de las condiciones crediticias para consumidores y bancos podría prolongar un periodo de lento crecimiento económico.
“Por el momento, no se sabe cuándo tocará fondo el mercado de la vivienda”, dijo el FMI en su Informe sobre Estabilidad Financiera Mundial, dado a conocer ayer en Washington. “Es necesario frenar el declive del mercado inmobiliario estadounidense para estabilizar el mercado, ya que así se contribuiría a la recuperación de los hogares y las instituciones financieras”.
El FMI, que hace un año fracasó en diagnosticar la profundidad del colapso de las hipotecas de alto riesgo, ratificó su pronóstico de abril de pérdidas del orden de $1 billón a raíz de la crisis hipotecaria de Estados Unidos, a la vez que las autoridades estadounidenses contribuyeron a contener las pérdidas financieras, “los riesgos crediticios siguen elevados” y los bancos necesitan captar más capital.
Las depreciaciones de activos y pérdidas en todo el mundo han totalizado $469.000 millones el año pasado y se han recaudado $345.000 millones en capital.
La entidad, con sede en Washington, dijo en su informe que las decisiones de la Reserva Federal de ampliar los préstamos a las firmas de Wall Street “han sido exitosas en contener los riesgos sistémicos”. No obstante, la debilidad en el mercado de la vivienda amenaza con ampliar la caída.
“Ahora la preocupación creciente es que el notable aumento de la morosidad y las ejecuciones hipotecarias en el mercado inmobiliario estadounidense y el continuo descenso de los precios de la vivienda provoquen una desvalorización más generalizada de los préstamos”, dijo el informe.
Jaime Caruana, jefe de la división de mercado de capital del FMI, dijo ayer a la prensa en Washington que los datos de la vivienda en el mercado estadounidenses daban pocos indicios de mejoría “Algunos indicadores siguen bajando”, dijo. Agregó que mejorar la situación financiera en algún punto ayudará a recuperar el mercado.
La caída de los precios de las acciones está dificultando que los bancos capten capital, aumentando el riesgo de una espiral a la baja en la economía global, dijo el FMI. La perspectiva de los bancos podría volver renuentes a los inversores a aportar los fondos frescos que se necesitan para restaurar la fortaleza de las instituciones financieras, explicó el fondo.
“Conforme se desacelere el crecimiento económico, los bancos enfrentarán vientos de frente para mantener las ganancias debido a la caída de la calidad crediticia, la baja de los ingresos por las comisiones, elevados costos de financiamiento y la exposición a las aseguradoras de hipotecas y bonos”, indicó Caruana en una declaración.
El FMI advirtió que la quiebra de Fannie Mae y Freddie Mac aumentaría la fragilidad del sistema financiero, las dos mayores fuentes de financiamiento hipotecario de Estados Unidos. Las acciones de ambas empresas perdieron más del 80% en el último año.
Washington- El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que no se sabe cuándo colapsará el mercado de la vivienda en Estados Unidos y advirtió que el deterioro de las condiciones crediticias para consumidores y bancos podría prolongar un periodo de lento crecimiento económico.“Por el momento, no se sabe cuándo tocará fondo el mercado de la vivienda”, dijo el FMI en su Informe sobre Estabilidad Financiera Mundial, dado a conocer ayer en Washington. “Es necesario frenar el declive del mercado inmobiliario estadounidense para estabilizar el mercado, ya que así se contribuiría a la recuperación de los hogares y las instituciones financieras”.
El FMI, que hace un año fracasó en diagnosticar la profundidad del colapso de las hipotecas de alto riesgo, ratificó su pronóstico de abril de pérdidas del orden de $1 billón a raíz de la crisis hipotecaria de Estados Unidos, a la vez que las autoridades estadounidenses contribuyeron a contener las pérdidas financieras, “los riesgos crediticios siguen elevados” y los bancos necesitan captar más capital.
Las depreciaciones de activos y pérdidas en todo el mundo han totalizado $469.000 millones el año pasado y se han recaudado $345.000 millones en capital.
La entidad, con sede en Washington, dijo en su informe que las decisiones de la Reserva Federal de ampliar los préstamos a las firmas de Wall Street “han sido exitosas en contener los riesgos sistémicos”. No obstante, la debilidad en el mercado de la vivienda amenaza con ampliar la caída.
“Ahora la preocupación creciente es que el notable aumento de la morosidad y las ejecuciones hipotecarias en el mercado inmobiliario estadounidense y el continuo descenso de los precios de la vivienda provoquen una desvalorización más generalizada de los préstamos”, dijo el informe.
Jaime Caruana, jefe de la división de mercado de capital del FMI, dijo ayer a la prensa en Washington que los datos de la vivienda en el mercado estadounidenses daban pocos indicios de mejoría “Algunos indicadores siguen bajando”, dijo. Agregó que mejorar la situación financiera en algún punto ayudará a recuperar el mercado.
La caída de los precios de las acciones está dificultando que los bancos capten capital, aumentando el riesgo de una espiral a la baja en la economía global, dijo el FMI. La perspectiva de los bancos podría volver renuentes a los inversores a aportar los fondos frescos que se necesitan para restaurar la fortaleza de las instituciones financieras, explicó el fondo.
“Conforme se desacelere el crecimiento económico, los bancos enfrentarán vientos de frente para mantener las ganancias debido a la caída de la calidad crediticia, la baja de los ingresos por las comisiones, elevados costos de financiamiento y la exposición a las aseguradoras de hipotecas y bonos”, indicó Caruana en una declaración.
El FMI advirtió que la quiebra de Fannie Mae y Freddie Mac aumentaría la fragilidad del sistema financiero, las dos mayores fuentes de financiamiento hipotecario de Estados Unidos. Las acciones de ambas empresas perdieron más del 80% en el último año.