Chanel vende en plena desaceleración 

Cuando Chanel SAS equipó las boutiques en noviembre con su última serie de vestidos de 4  mil euros ($5.380) y de bolsos de 3.200 euros para salidas invernales a lugares como St. Barts, la compañía no sabía con seguridad cómo reaccionarían los consumidores.
“Éramos un poco escépticos respecto del medio global”, dijo Bruno Pavlovsky, que dirige la división de moda de Chanel, de capital cerrado. Dos meses después, “más o menos se ha vendido todo. Fue toda una sorpresa”.
Chanel, propiedad de los hermanos Wertheimer de Francia, supera sus propias expectativas conforme rivales desde la firma fabricante de bolsos Coach Inc. hasta Cie. Financière Richemont SA, propietaria de Cartier, dan a conocer ventas declinantes que decepcionan a los inversores.
Burberry Group Plc, el mayor fabricante de productos de lujo de Gran Bretaña, dijo este mes que son menos los clientes que visitan los locales, mientras que es más difícil complacer a chinos y brasileños, de quienes las marcas dependen cada vez más para su crecimiento, según la firma de indumentaria masculina Ermenegildo Zegna SpA.
La fuerte demanda de las colecciones de Chanel, que tiene sede en París, y de Hermès International SCA indica que los consumidores siguen gastando en el extremo más caro del mercado de 212.000 millones de euros de productos personales de lujo a pesar de que la industria tiene este año el crecimiento más débil desde el comienzo de la crisis financiera global.
Los productos de Chanel van desde un lápiz labial de 30 euros hasta sacos bordados de 25 mil euros y compiten en el llamado segmento de lujo absoluto, que Bain Co. pronostica que tendrá el crecimiento más rápido hasta por lo menos 2014.
“Cuando se tiene el producto adecuado, todo va muy rápido, tal vez más rápido de lo que hemos visto en el pasado”, dijo Pavlovsky en una entrevista realizada la semana pasada en su oficina, cerca de donde Chanel inauguró su primer local en París. Las ventas de perfumes y relojes “tienen un muy buen desempeño”, dijo.
Chanel se ha convertido en una de las marcas más codiciadas desde que hace más de un siglo la fundara la diseñadora francesa Gabrielle Chanel, conocida como Coco.
Con $6.680 millones, la firma que produce el perfume Nº5 y el traje de paño de falda y chaqueta es la cuarta marca de lujo más valiosa del mundo después de Louis Vuitton, Hermès y Rolex, estimó Millward Brown Optimor en su estudio BrandZ de 2012. Chanel no da a conocer sus ventas.
El aparente éxito de la compañía debe mucho a la forma en que ha manejado su imagen, según Luca Solca, jefe de análisis de productos de lujo de Exane BNP Paribas en Londres.
Chanel se ha establecido en una “posición alta” en ropa y productos de cuero, si bien obtiene el grueso de sus 6.500 millones de euros de ventas minoristas del elevado margen de perfumes y cosméticos, estima Solca.

Bloomberg