NOTA DE TANO

Alajuelense recibe al Herediano contra las cuerdas

Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Sábado 07 diciembre, 2019

De pronto y muy temprano, la final de la segunda fase del Torneo Apertura tomó otro sesgo, con el triunfo del Herediano 2-0 frente al Alajuelense.

Y decimos temprano, porque en media hora el Team ya tenía el resultado a su favor, una ventaja que no es corta, ni larga, pero le permite ciertas comodidades para el juego de vuelta que se juega el domingo, ahora en territorio erizo.

Hace una semana, el Herediano estaba obligado a meterle un gol al Saprissa en Tibás para seguir con vida en el torneo. Después de empatar 1-1 con los morados en la ida, el Team quedaba eliminado si no le anotaba al Monstruo. Un gol de Oscar Esteban Granados alivió el escenario, se empataron los cartones, se fueron a los penales y en esa instancia, el equipo de José Giacone eliminó al de Paté Centeno para ir a la semifinal ante la Liga. Hoy, el entorno es bien diferente para los rojiamarillos, después de su victoria 2-0 en su patio.

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Ahora, si el Herediano le mete un gol al Alajuelense en el Morera Soto, prácticamente liquida la serie, porque incluso, ganando el Alajuelense digamos 3-1, pierde la eliminatoria, porque ese gol de los florenses vale doble al ser de visita.

Alajuelense debe ganar mínimo 3-0 para campeonizar automáticamente. Si vence 2-0 alarga el juego a los tiempos extras y un empate por cualquier marcador le da el pasaporte a la final al Team.

Recordar que si Herediano elimina a la Liga, gana la segunda fase del campeonato y debe enfrentar de nuevo a los manudos, vencedores de la primera fase en otra serie de dos partidos, ahora sí, por la corona.

Ese 2-0 es un marcador cómodo para que los discípulos de Giacone manejen el partido, no a su antojo, pero si con muchas ventajas. La nómina del Herediano es de peso, de recorrido y respetable y no hay duda que su par de volantes centrales, Oscar Esteban Granados y Randall Azofeifa, veteranos de mil batallas, serán el eje de un equipo que jugará con esa ventaja y con el reloj.

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El Alajuelense está contra las cuerdas, el equipo fue muy bien estudiado por el cuerpo técnico del Herediano, que desde luego va a planificar la vuelta montado en esa ventaja del 2-0.

Toca a los discípulos de Andrés Carevic, jugar un partido perfecto en ofensiva, anotar temprano para motivar a los miles de espectadores que estarán en las gradas de La Catedral, a que lo empujen en procura de un par de “golcitos” más que lo lleven al ansiado título 30.

Ariel Lássiter, Jonathan McDonald, Marco Ureña, Jonathan Moya, el cuerpo de artilleros del León, están obligados a meter metralla en zona de ataque y besar los cordeles de Esteban Alvarado mínimo en tres oportunidades, que el marco de Adonis Pineda quede intacto y así la Liga podría saborear la corona.

La tarea es inmensa, muy complicada, bien difícil, pero no imposible.

gpandolfo@larepublica.net

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