¿A quién favorece la factura electrónica?

Son muchas las razones por las cuales debemos aceptar y enfrentar el proyecto de implantación de factura electrónica, como un proyecto país. Las ventajas que esta tiene a todos nos favorecen, y una decidida participación de todos los sectores podría sumar réditos para todos beneficiosos.
La decisión de impulsar para los próximos meses la implementación de factura electrónica, para mejorar la recaudación del impuesto de ventas por parte de los entes responsables, genera opiniones diversas y a algunos hasta sorpresa les ha causado.
Lo cierto es que esto era un proceso anunciado. El país esta preparado y en las mejores condiciones para iniciar su correcta y efectiva implementación, ¿pero a quién favorece?, ¿es este un procedimiento únicamente de control tributario? En los países que han tomado esta decisión antes que Costa Rica y que su implementación ha sido exitosa, se ha demostrado que los beneficios son diversos y que el tema fiscal si bien es cierto suma y es un detonante para su implementación, no es el único ni necesariamente el más importante.
La implementación de la factura electrónica en un país como Costa Rica debe sacar provecho a muchos esfuerzos ya realizados. El acceso a Internet y el grado de difusión de la tecnología entre los profesionales independientes, pequeñas, medianas y grandes empresas, debe garantizar que con un esfuerzo ordenado la implementación de este nuevo procedimiento no debe ser traumática, ni para los emisores de facturas ni para los receptores de estas.
El tema ecológico siempre es el más mencionado como el principal de los beneficios, este incluye aristas que cubren evidentemente la economía en el papel, el uso de papeles químicos, el transporte y evidentemente su almacenamiento y conservación, tema fundamental para efectos del control y seguridad.
Otro asunto que muchos mencionan entre los beneficios es la rapidez de emisión de las facturas, su posible corrección y entrega, así como la imagen moderna y eficiente que brinda una empresa o persona que emite facturas electrónicas.
Todo suma, el control del fisco, el tema ecológico y la imagen de la empresa, pero ¿dónde está el mejor de los beneficios? Si damos por un hecho nuestro necesario aporte de los impuestos, nuestra obligación en un aporte a la ecología y la necesaria agilidad e imagen de nuestros servicios, ninguno refleja el que considero es el más relevante de los beneficios “el ordenamiento que se puede dar en las organizaciones y profesionales independientes con un sistema simple y que hace uso de los recursos tecnológicos con que contamos”.
Para sectores como los profesionales independientes y pymes, quienes en una gran mayoría requerimos esfuerzos especiales para saber a quién facturé, cuándo y cómo lo hice, pagaron esta factura o no, la generación de inteligencia de negocios a partir de estos datos será fundamental para el crecimiento y consolidación de los servicios que se brindan. Todo esto sin tomar en cuenta la oportunidad que tendremos los pequeños empresarios en poder acceder a financiamiento a partir de facturación electrónica o de hacer uso de medios de pagos no tradicionales para este sector productivo.
Nos enfrentaremos en los próximos meses a reacciones naturales y ya conocidas cuando un cambio de esta magnitud se da, pero la reducción de costos comprobada de un 80% en la emisión, entrega y trámite de las facturas convencerá a muchos de su aplicación inmediata.
No está lejos el día que en la gasolinera o en el restaurante nos preguntarán nuestra dirección de e-mail para entregarnos la factura correspondiente de los servicios recibidos. Bienvenido sea un cambio que nos favorecerá a todos.

Alejandro Montalvo, gerente general de GTI
erickmv@racsa.co.cr