El país en los últimos años se ha focalizado en el sector exportador y ha descuidado a las empresas locales, claves para generar mayor igualdad y equidad

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Crecimiento económico con equidad

El gran debate que tiene actualmente nuestro país es cómo generar crecimiento económico que permita reducir la pobreza y la desigualdad.
Es claro que para lograr esta gran hazaña se debe generar una política pública integral que permita generar oportunidades para todos. Para ello es clave que el nuevo gobierno genere una propuesta que permita que todos los actores sociales estén involucrados en este nuevo rumbo de crecimiento con equidad.
Para lograr que las clases más vulnerables puedan aprovechar una estrategia de desarrollo integral, es clave no solo generar crecimiento económico, sino definir los mecanismo que permitan que la riqueza generada por ese crecimiento se distribuya en toda la economía. Este es el mayor reto, si lo que se desea es sacar de la pobreza al 20% de la población costarricense que se encuentra en esta situación.
Como costarricense considero fundamental generar una política productiva que permita dinamizar la economía doméstica, sin descuidar el sector exportador el cual ha sido fundamental para el crecimiento de la producción nacional, y con ello la creación de fuentes de trabajo.
Pero el país, en los últimos años, solo se ha focalizado en este segmento de la economía y se ha descuidado a las empresas locales, las cuales son claves para generar mayor igualdad y equidad en Costa Rica.
Si el nuevo gobierno logra generar inversión en pro del desarrollo local, fortaleciendo y facilitando la formalización y creación de empresas nacionales competitivas, se desencadenaría un verdadero desarrollo endógeno. Y si se apuesta a una política productiva integral donde se generen encadenamientos fuertes y sostenibles entre las Pymes y las transnacionales, no solo permitiría generar empleos directos e indirectos de calidad, sino que también se generaría una mayor producción nacional y con ello mayores ingresos frescos para las arcas del Estado.
Una política productiva integral debe ser una propuesta que los actuales candidatos deben consolidar, porque esto generaría prosperidad para Costa Rica. Esta política debe estar direccionada: en incrementar los estándares de calidad de las empresas locales que puedan satisfacer las exigencias de las empresas foráneas, propiciar un trabajo estratégico entre las universidades públicas y el INA para generar competitividad real en nuestras empresas, facilitar el acceso al crédito, hacer un diagnóstico que permita identificar en qué áreas estratégicas se puede generar un link sostenible entre las Pymes y la IED, estabilizar la economía para mantener tasas de interés bajas y estables, resolver el tema del déficit fiscal, reducir la tramitología sin descuidar la transparencia, fortalecer al INA como generador de empleabilidad, seguir con la estrategia agresiva de atracción de IED de alta tecnología, y mejorar la infraestructura del país.
Queremos crecer con equidad. Apostemos por este tipo de política pública.

Michael Contreras Solera

Máster en Política Económica