Victoria insuficiente
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 24 junio, 2010
Victoria insuficiente
Dependía de sí misma para pasar, pero acabó pagando su falta de acierto en la primera mitad. Serbia cayó inesperadamente ante Australia 2-1 y ni una ni otra selección estarán en los octavos de final del Mundial.
El partido se presentó como un choque de dos estilos, en el que la selección de Australia, la única del Grupo D que no dependía de sí misma para clasificarse, debía arriesgar más. Tras unos minutos de dominio inicial de los “socceroos”, Serbia encontró un camino por el flanco derecho del combinado australiano, donde Carney y Neill sufrían demasiado.
Desde esa banda, Krasic protagonizó un par de acciones que pusieron a prueba los reflejos de Schwarzer, desde ahí también llegaría un remate de Ivanovic y los centros que buscaban al siempre peligroso Zigic.
Mientras, Australia intentaba no perder la compostura. Un cabezazo que Cahill fue lo más destacado de los “aussies” durante todo el primer tiempo.
Pero todo cambió tras la reanudación. Australia adelantó sus líneas, presionó más arriba y se fue en busca del milagro de la clasificación. Fue Cahill, quien cabeceó a gol un balón colgado al área desde el punto de penal a los 69 minutos. Cuatro minutos después, Holman hizo el segundo.
Apenas faltaba un cuarto de hora y Serbia, que había dominado la mayor parte del choque, estaba abajo en el marcador.
En un arrebato de fe, los balcánicos pusieron cerco a la portería defendida por Schwarzer, llegaron con peligro, les anularon un gol por fuera de juego, no les señalaron un penal por unas manos dentro del área e incluso tuvieron opciones de darle la vuelta al partido.
Pantelic recortó distancias a seis minutos para el final.
El propio Pantelic pudo empatar, pero Culina también pudo hacer el tercero. Al final, el marcador ya no se movió más.
Nelspruit /EFE
Dependía de sí misma para pasar, pero acabó pagando su falta de acierto en la primera mitad. Serbia cayó inesperadamente ante Australia 2-1 y ni una ni otra selección estarán en los octavos de final del Mundial. El partido se presentó como un choque de dos estilos, en el que la selección de Australia, la única del Grupo D que no dependía de sí misma para clasificarse, debía arriesgar más. Tras unos minutos de dominio inicial de los “socceroos”, Serbia encontró un camino por el flanco derecho del combinado australiano, donde Carney y Neill sufrían demasiado.
Desde esa banda, Krasic protagonizó un par de acciones que pusieron a prueba los reflejos de Schwarzer, desde ahí también llegaría un remate de Ivanovic y los centros que buscaban al siempre peligroso Zigic.
Mientras, Australia intentaba no perder la compostura. Un cabezazo que Cahill fue lo más destacado de los “aussies” durante todo el primer tiempo.Pero todo cambió tras la reanudación. Australia adelantó sus líneas, presionó más arriba y se fue en busca del milagro de la clasificación. Fue Cahill, quien cabeceó a gol un balón colgado al área desde el punto de penal a los 69 minutos. Cuatro minutos después, Holman hizo el segundo.
Apenas faltaba un cuarto de hora y Serbia, que había dominado la mayor parte del choque, estaba abajo en el marcador.
En un arrebato de fe, los balcánicos pusieron cerco a la portería defendida por Schwarzer, llegaron con peligro, les anularon un gol por fuera de juego, no les señalaron un penal por unas manos dentro del área e incluso tuvieron opciones de darle la vuelta al partido.
Pantelic recortó distancias a seis minutos para el final.
El propio Pantelic pudo empatar, pero Culina también pudo hacer el tercero. Al final, el marcador ya no se movió más.
Nelspruit /EFE