Un rompecabezas llamado Robben

El mediocampista zurdo ha sido el motor de Holanda en este Mundial

Holanda, el rival de cuartos de final, ese que ya Jorge Luis Pinto debe estar desmenuzando con su cuerpo técnico, tiene en Arjen Robben un rompecabezas difícil de descifrar.

El cuadro tulipán, que ha ganado su cuatro juegos, llega como la selección más goleadora de este Mundial. Ha anotado 12 goles en esos partidos, para un promedio de 4,6 goles por encuentro.
En esas estadísticas Robben tiene mucha culpa, no solo por sus tres goles, sino que es pieza fundamental a la hora de llevar la ofensiva de su selección hacia campo contrario.
Además de anotar también suma una asistencia, 17 incursiones al área rival y ha disparado 17 veces a marco, según datos de la FIFA.
El mediocampista es ágil, rápido, incisivo, inteligente, con mucho desequilibrio y con una zurda muy complicada de frenar.
Su velocidad le ha permitido colarse en la lista de los diez futbolistas más rápidos del mundo, ya que en un arranque logra alcanzar más de 30 kilómetros por hora.
Sin duda, que el jugador de 30 años le traerá muchas preocupaciones a la zaga nacional, se moverá por todo el frente del ataque pero especialmente por el lado donde se encuentran Michael Umaña y Junior Díaz.
Durante el Mundial ya España, Australia, Chile y México han sufrido con el 11 tulipán.
El equipo es consciente del buen estado de forma que atraviesa el jugador, tanto que en el complicado partido contra los aztecas cuando perdía 1-0 su técnico Luis Van Gaal les decía a sus jugadores que le dieran el esférico a él.
“Denle el balón a Robben, dijimos desde el banquillo, porque veíamos que era la forma de lograrlo más fácilmente”, explicó el entrenador, como la fórmula que utilizaron para romper la muralla mexicana.
El futbolista del Bayern Múnich se entiende a la perfección con el delantero Robben Van Persie y también con el mediocampista Wesley Sneijder. Ya son muchos años los que llevan jugando juntos y cada uno conoce sus movimientos.
Robben busca su revancha, tratar de llevar a Holanda a una nueva final y esta vez sí marcar el gol definitivo, para olvidar ese mano a mano que perdió con Iker Casillas y que pudo significar el título para la “Naranja Mecánica” en Sudáfrica 2010.
“Aún tengo pesadillas con esa jugada. Duele fallar una oportunidad como esa y más en la final de un Mundial”, comentó al inicio de esta Copa del Mundo.
El holandés será todo un desafío para la zaga nacional, que ya pasó la prueba con jugadores como Edinson Cavani, Mario Balotelli, Wayne Rooney y Giorgios Samaras, y ahora tocará el turno de Robben y compañía.

Dinia Vargas
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