Comercio Electrónico: Una necesidad que se hizo evidente con el Covid-19

Costa Rica se ha convertido en los últimos años en un país caro para vivir, en parte por las altas tasas impositivas que se deben pagar para tener un negocio, pero también, en muchos casos, la falta de información al consumidor sobre las opciones permite que los precios no sean los más competitivos.

Si alguna vez han buscado un electrodoméstico con un valor alto y han visitado diferentes tiendas, quizás han podido encontrar importantes diferencias en marcas y características similares, e inclusive en el mismo artículo. Los que hemos tenido la oportunidad de buscar algún artículo en EE. UU., cuando lo vemos en la tienda o inclusive antes, lo primero que hacemos es buscar su valor en línea para asegurarnos si el precio y las características son las que buscamos. Pero esa opción no está disponible en Costa Rica.

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En el 2005, mientras vivía y estudiaba en EE. UU., y teniendo un presupuesto de estudiante, cuando necesitaba comprar algo lo veía en la tienda primero, y luego buscaba un mejor precio en línea. Desde entonces se conseguían muchas veces mejores precios en línea, y el sistema de entregas allá siempre ha sido muy bueno y rápido. En ese momento la plataforma más desarrollada que había de ventas en línea era Amazon. Hoy, existen en EE. UU., además de Amazon, empresas como Walmart que tienen importantes plataformas de venta en línea por las cuales completan una importante cantidad de sus ventas. De hecho, la tendencia en ese país ha sido cerrar centros comerciales precisamente porque los consumidores compran más en línea.

Lamentablemente, en Centroamérica en 2020 todavía el mercado en línea es muy limitado. La crisis del Covid-19 nos ha demostrado la importancia de poder tener la opción de comprar en línea y recibir lo que compramos en nuestras casas. Plataformas como Uber Eats, Rappi, y Glovo han logrado facilitar la situación, sobre todo para los restaurantes.

Pero ¿qué pasa con los demás artículos necesarios? Necesitamos un mercado en línea robusto, que le permita a los consumidores hacer compras informadas, a los mejores precios y con la posibilidad de dejar comentarios en línea sobre el servicio, la calidad del producto, etc. Empresas como Walmart, EPA, y similares deberían desarrollar sus plataformas para que casi sean la primera opción de los consumidores. Para las empresas de paquetería y correo es también una gran oportunidad. Pero además, el gobierno debería trabajar de la mano de alguna empresa tipo Amazon o similar que permita a los establecimientos locales colocar sus bienes para ventas en línea.

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En octubre del 2017, se incluyó en el Reglamento a la Ley de Promoción a la Competencia y Defensa Efectiva del Consumidor, un capítulo bastante comprensivo que regula lo relativo a la Protección al Consumidor en el contexto del Comercio Electrónico. Este capítulo incluye reglas importantes sobre la información que se le debe dar al consumidor, el perfeccionamiento de la venta, seguridad en los medios de pago, reclamos, protección de datos, entre otros.

Tomando en cuenta que contamos con el marco normativo apropiado, es un buen momento para que el gobierno y las empresas desarrollen las plataformas para fomentar un comercio electrónico que permita levantar la economía y salir adelante con las mejores opciones para todos los consumidores.

Esteban Agüero Guier

Socio

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