Tras caso Liberty Reserve país anuncia ley de extradición
Sharon Cascante scascante@larepublica.net | Jueves 30 mayo, 2013 12:00 a. m.
Tras caso Liberty Reserve país anuncia ley de extradición
Impulsar una ley que permita la extradición de nacionales, fue el anuncio que hizo hoy el Gobierno, después de revelarse el caso de lavado de dinero de la empresa Liberty Reserve, fundada por un estadounidense que adquirió la nacionalidad costarricense.
En la actualidad, la Constitución Política costarricense prohíbe la extradición de nacionales.
El proyecto es una señal concreta, no solo para costarricenses, sino para extranjeros que buscan la nacionalidad costarricense para evadir la justicia, de que en el país no se tolerará sus actividades.
"Como lo demuestran el caso Liberty Reserve y otros similares también recientes, el crimen organizado, con sus actividades ilícitas y violentas, ya es una amenaza para Costa Rica y una de las prioridades para nuestros gobiernos es desmantelar estas organizaciones", expresó Anna Andrew, embajadora de Estados Unidos en el país.
Las autoridades federales de EE.UU. acusaron este martes a la compañía Liberty Reserve, con sede en Costa Rica, de ser el banco de referencia del mundo criminal y facilitar el lavado de $6 mil millones a través de su sistema de moneda virtual.
Arthur Budovsky, fundador y máximo responsable de Liberty Reserve, fue detenido por la policía española en el aeropuerto de Madrid-Barajas la pasada semana, junto con el marroquí Azzeddine El Amine, considerado el "número dos" de la compañía.
Asimismo, fueron detenidas otras tres personas en Costa Rica y Nueva York, en una operación internacional en la que participaron de manera coordinada fuerzas de seguridad de 17 países. Dos acusados permanecen aún en paradero desconocido.
Budovsky adquirió la nacionalidad costarricense al casarse con una mujer de este país, aparentemente tras pagarle una suma de dinero.
Por el caso Liberty Reserve, las autoridades judiciales de Costa Rica allanaron la semana pasada varias propiedades lujosas en San José en las que decomisaron computadoras, servidores, documentos y vehículos de lujo.
Según las investigaciones, en 2011 la compañía fue investigada por las autoridades de Costa Rica, por lo que posteriormente pasó a funcionar clandestinamente bajo una serie de compañías pantalla.