ICE perdió $2,5 millones por robo de cable
Danny Canales dannycanales.asesor@larepublica.net | Martes 28 agosto, 2007
Debido a daños causados en los últimos cuatro años
ICE perdió $2,5 millones por robo de cable
• Problema ha dejado incomunicadas a varias comunidades
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
El robo de cable no se detiene. En los primeros seis meses del año se registró el hurto de 18 kilómetros de alambre.
El problema afecta a los abonados de los servicios de Internet, telefonías fija y móvil y electricidad.
Además el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) sufre un fuerte impacto en sus finanzas.
Solo en los últimos cuatro años esa entidad debió invertir $2,5 millones para reponer el material sustraído.
Esa suma incluye los recursos que el ICE dejó de facturar por la suspensión de los servicios.
También comprende lo invertido para reparar los daños por los cortes en los cables de fibra óptica, el robo de tubos galvanizados en la salida de los postes y de cables telefónico y eléctrico, así como daños a las radiobases del servicio celular.
El problema dejó incomunicadas a varias comunidades, pues estuvieron varias horas sin los servicios de Internet, teléfono y energía, según estableció un reporte difundido ayer por el ICE.
San José, con 72 denuncias realizadas durante el año, y Limón con 60, son las provincias que registran la mayor incidencia de hurtos.
Les siguen Cartago, con 15, y Alajuela, con 14. En Guanacaste es donde han ocurrido menos avisos por la sustracción de cable.
El robo de ese material se inició en 2003. En la mayoría de casos son los indigentes quienes sustraen el material para venderlo a talleres dedicados a la recolección de chatarra.
Lo que hacen con el cable es fundirlo y venderlo, debido a que el mercado lo paga a buen precio ante la escasez de materiales que actualmente existe en el mundo.
“Las acciones comprenden la instalación de alarmas en delegaciones y subdelegaciones de la Fuerza Pública y en casas de vecinos comprometidos a ayudar y vigilar la red”, informó Glauco Quesada, coordinador de la oficina de seguridad del ICE.
Además, para desestimular el robo, el Instituto ha empezado a instalar tecnologías que no representan ningún valor comercial, agregó el funcionario.
Sin embargo, el ICE sigue apostando a la denuncia de la población como su principal herramienta para combatir el problema.
Para ello, Quesada instó a los ciudadanos a que den parte a las autoridades de Seguridad, mediante el servicio de 911, si ven que en su comunidad están sustrayendo cable de algún servicio público.