Estilizada intriga mafiosa
| Jueves 18 septiembre, 2008
Estilizada intriga mafiosa
• El maestro canadiense David Cronenberg, anota otro hito memorable en su filmografía
“Promesas peligrosas”
(Eastern Promises)
Dirección: David Cronenberg. Reparto: Viggo Mortensen, Naomi Watts, Vincent Cassel, Armin Mueller-Stahl. Duración: 1:40. Origen: Inglaterra-Canadá-EE.UU. 2007. Calificación: 9.
Pocos cineastas contemporáneos ostentan una carrera tan rigurosa y sobresaliente como la de David Cronenberg. Después de alcanzar uno de los máximos picos de su arte con “Una historia violenta” (2005), el maestro canadiense anota otro hito memorable en su filmografía.
Con guion original de Steven Knight, “Promesas peligrosas” es un vibrante drama gansteril, ubicado en el ambiente misterioso de la mafia rusa en Londres. Detrás de una intriga emocionante se perfila un discurso humanista que enriquece el material, otorgándole profundidad y trascendencia.
La intensa y siempre fascinante Naomi Watts encarna a una enfermera llamada Anna. Ella está de guardia, cuando llega a su hospital una joven herida, quien fallece dando a luz a una bebé. Por medio de un diario, Anna descubre que la chica estaba involucrada con los líderes de una organización criminal: el poderoso “padrino” Semyon y su irresponsable hijo, Kirill. Anna llega al restaurante que sirve como fachada para las actividades delictivas de la familia. De inmediato, la mujer llama la atención del callado y eficiente Nikolai, el cual presta servicio como chofer personal y guardaespaldas de Kirill.
A partir de la primera secuencia, donde un hombre es degollado en primer plano, el espectador se precipita en un mundo brutal y despiadado. La cámara explora ese mundo, revela sus mecanismos y sus códigos secretos, casi como si fuera un estudio antropológico.
En este thriller único, oscuro y estilizado no se oye ni un solo disparo. Los asesinatos son cometidos con navajas y cuchillos; y Cronenberg, antiguo maestro del horror visceral, los visualiza con un grado de realismo desconcertante. El clímax se da en un sauna, donde Nikolai está desnudo, totalmente indefenso, a merced de dos matones con armas blancas. La ruda pelea que surge a continuación es quizá la mejor secuencia de acción de la temporada, dejando por el suelo las absurdas y ridículas exageraciones que abundan en el promedio de productos hollywoodenses.
Además de su impecable ejecución formal, “Promesas peligrosas” destaca por su válida base moral, proporcionando reflexiones importantes sobre dignidad, inocencia, corrupción, honor y respeto a la vida.
Lo anterior se sustenta en la labor de un elenco impecable. Lo encabeza el óptimo Viggo Mortensen, compenetrado con su personaje de una manera impresionante, que le valió una muy merecida nominación al premio Oscar.
• El maestro canadiense David Cronenberg, anota otro hito memorable en su filmografía
“Promesas peligrosas”
(Eastern Promises)
Dirección: David Cronenberg. Reparto: Viggo Mortensen, Naomi Watts, Vincent Cassel, Armin Mueller-Stahl. Duración: 1:40. Origen: Inglaterra-Canadá-EE.UU. 2007. Calificación: 9.
Pocos cineastas contemporáneos ostentan una carrera tan rigurosa y sobresaliente como la de David Cronenberg. Después de alcanzar uno de los máximos picos de su arte con “Una historia violenta” (2005), el maestro canadiense anota otro hito memorable en su filmografía.
Con guion original de Steven Knight, “Promesas peligrosas” es un vibrante drama gansteril, ubicado en el ambiente misterioso de la mafia rusa en Londres. Detrás de una intriga emocionante se perfila un discurso humanista que enriquece el material, otorgándole profundidad y trascendencia.
La intensa y siempre fascinante Naomi Watts encarna a una enfermera llamada Anna. Ella está de guardia, cuando llega a su hospital una joven herida, quien fallece dando a luz a una bebé. Por medio de un diario, Anna descubre que la chica estaba involucrada con los líderes de una organización criminal: el poderoso “padrino” Semyon y su irresponsable hijo, Kirill. Anna llega al restaurante que sirve como fachada para las actividades delictivas de la familia. De inmediato, la mujer llama la atención del callado y eficiente Nikolai, el cual presta servicio como chofer personal y guardaespaldas de Kirill.
A partir de la primera secuencia, donde un hombre es degollado en primer plano, el espectador se precipita en un mundo brutal y despiadado. La cámara explora ese mundo, revela sus mecanismos y sus códigos secretos, casi como si fuera un estudio antropológico.
En este thriller único, oscuro y estilizado no se oye ni un solo disparo. Los asesinatos son cometidos con navajas y cuchillos; y Cronenberg, antiguo maestro del horror visceral, los visualiza con un grado de realismo desconcertante. El clímax se da en un sauna, donde Nikolai está desnudo, totalmente indefenso, a merced de dos matones con armas blancas. La ruda pelea que surge a continuación es quizá la mejor secuencia de acción de la temporada, dejando por el suelo las absurdas y ridículas exageraciones que abundan en el promedio de productos hollywoodenses.
Además de su impecable ejecución formal, “Promesas peligrosas” destaca por su válida base moral, proporcionando reflexiones importantes sobre dignidad, inocencia, corrupción, honor y respeto a la vida.
Lo anterior se sustenta en la labor de un elenco impecable. Lo encabeza el óptimo Viggo Mortensen, compenetrado con su personaje de una manera impresionante, que le valió una muy merecida nominación al premio Oscar.