El enigmático significado de los grabados en las rocas gigantes de la actual frontera entre Colombia y Venezuela

Felipe Llambías - BBC News Mundo | Lunes 17 junio, 2024

Arte rupestre monumental a orillas del Orinoco. — Los investigadores documentaron dibujos de serpientes de hasta 40 metros de largo.

Un grupo de investigadores de Colombia y Reino Unido documentó el arte rupestre más grande del mundo en una zona cercana al río Orinoco.

Los gigantes dibujos hechos sobre roca, "de los más enigmáticos del mundo" según el equipo arqueológico, muestran grandes serpientes -boas y anacondas- de hasta 40 metros de longitud y otros animales o figuras geométricas.

"Son varias veces más grandes que un humano adulto en varias dimensiones y se distribuyen a lo largo del río Orinoco en un punto que fue una zona de intenso contacto e interacción entre diferentes grupos étnicos y lingüísticos en el pasado", le explicó a BBC Mundo Philip Riris, profesor de modelado arqueológico y paleoambiental en la Universidad de Bournemouth (Reino Unido).

Riris investigó este arte sobre rocas junto a los colombianos José Oliver y Natalia Lozada Mendieta, y los resultados fueron publicados en la revista científica Antiquity el 4 de junio.

El lugar se encuentra en torno a una zona llamada Rápidos de Atures, a ambos lados del Orinoco, en la frontera entre Colombia y Venezuela.

El ecosistema en esa zona del Orinoco es de sabana, de extensos llanos, con elevaciones abruptas de granito llamadas inselbergs o "montes isla" que aunque son difíciles de escalar y peligrosas, no es imposible hacerlo.

"Son negras, muy, muy negras, pero ese no es el color natural de la roca, sino que es una mancha bacteriana", dijo el experto.

Agregó que no se necesita demasiado esfuerzo para raspar la capa superior y encontrar el color natural de la roca, que es blanca o un gris muy claro, por lo que los habitantes de siglos atrás podían crear los dibujos tallando con una piedra.

"Aunque los grabados son muy grandes, en realidad no son muy profundos, pueden tener uno o dos milímetros como máximo", agregó.

El investigador José Oliver delante de los cerros donde están algunos de los dibujos rupestres gigantes.

De acuerdo a Riris, los dibujos del lado venezolano ya han sido muy estudiados, pero "se ha realizado muy poco trabajo arqueológico en el lado colombiano del Orinoco".

"Esto es único a escala global, no hay nada como esto", señaló.

Arte precolombino

El equipo de investigación cree que estos dibujos son precolombinos -de entre el año 1000 y el 1500- y que servían como frontera o delimitación para los pueblos indígenas que allí habitaban.

Los dibujos en las grandes rocas "están espaciados con bastante regularidad, ocurren en algunos intervalos regulares moviéndose río arriba o río abajo, como se prefiera, y en particular los paneles monumentales que tienen serpientes se repiten con un número relativamente limitado de motivos diferentes”, afirmó Riris.

"Creemos que estaban señalando algún aspecto de territorialidad o identidad social, o ambas cosas. Hay un aspecto de la territorialidad que es: 'Este es nuestro territorio'. Es excluir, como una señal de advertencia", indicó el arqueólogo.

"Pero también, si sabes lo que significa la serpiente o si la serpiente o los motivos tienen significado para ti, entonces es una señal de que estás entre amigos".

Riris explicó que las serpientes gigantes aparecen en varios mitos indígenas del norte de Sudamérica y que a menudo representan deidades creadoras.

"Cuando el mundo fue creado y era todo agua, las serpientes fueron las primeras en surgir. Al viajar por los ríos, también los crearon, metafóricamente hablando", expuso.

"Debido a las formas de las canoas y debido a que las canoas también navegan por los ríos, a veces a las serpientes se les llama metafóricamente canoas, para que sean contenedores de personas, y debido a que son contenedores de personas, también tienen una asociación con el aspecto reproductivo femenino, porque las mujeres contienen personas en el embarazo", agregó.

El investigador sostuvo que, entre el año 1000 y la llegada de Cristobal Colón a América, la zona del Orinoco Medio se pobló de una forma que describe como "intensa" y por ello es que existe una gran cantidad de sitios arqueológicos alrededor.

"El arte rupestre como este, material que deliberadamente comunica identidad o señala territorialidad, no surge en el vacío. Tiene que ser en respuesta a algo. Cuando hay un paisaje relativamente densamente poblado, se esperaría que apareciera arte rupestre como este”, explicó.

Los investigadores creen que en el futuro se encontrarán más sitios de arte rupestre monumental a lo largo del río Orinoco y sus afluentes.

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