Código Tecno: Apple ataca a la educación
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 08 febrero, 2012
Apple ataca a la educación
Busca introducir libros de texto en el iPad, para conquistar ese mercado y vender más equipos
Muy poco antes de morir, Steve Jobs se reunió en un par de ocasiones con el magnate de los medios Rupert Murdoch. Buscaban la forma de introducir el iPad dentro del mercado periodístico. Lo veían como la mejor forma que tiene esa industria para enfrentar la crisis provocada por la revolución de Internet. Quienes usan el iPad se van acostumbrando a pagar por lo que descargan, y los medios impresos podrían encontrar allí una salvación.
Dice Walter Isaacson, el biógrafo de Jobs, que gran parte de esas charlas solían deslizarse hacia el tema de la educación. Y que los empresarios coincidían en que el negocio de los libros de texto impreso iba a ser rápidamente sustituido por los materiales educativos digitales. Jobs veía este mercado como el siguiente a transformar.
Parece que Apple sigue fiel al camino trazado por Jobs. En el primer gran evento tras la muerte de su líder, la empresa presentó material educativo para el iPad: la aplicación gratuita iBooks2, desde donde se pueden descargar libros y manuales escolares; así como iBooks Author también gratis, para que cualquiera pueda elaborar libros interactivos.
La empresa anunció un acuerdo con los tres gigantes editoriales de los Estados Unidos —McGraw Hill, Pearson y Houghton Mifflin—, que controlan el mercado.
Aunque no faltaron las críticas. Algunos especialistas destacan que estos libros no introducen prácticamente ningún cambio en lo pedagógico.
Además, como todos los productos de Apple, se trata de una plataforma cerrada (todo se produce y comercializa a través de esa empresa), algo que va en contra del espíritu de una educación democrática y para todos; así como del Internet participativo.
La visión de Jobs logró transformar mercados como la música, los celulares y la informática. Pero la educación, ¿no será mucho?
Por Ricardo Braginski
rbraginski@larepublica.net