País contó con la Asamblea Legislativa más productiva en 34 años para lidiar con la Covid-19

Para lidiar con la emergencia sanitaria de la Covid-19, el presidente Carlos Alvarado contó con la ayuda de la Asamblea Legislativa más productiva de los últimos 34 años, según el Estado de la Nación.

La ley de alivio fiscal para las empresas, la reducción de la jornada laboral en el sector privado para evitar más despidos, el bono proteger, la ley de educación dual y al menos 15 iniciativas para que Costa Rica tuviera un lugar en la OCDE, son algunas de las nuevas leyes promulgadas en 2019 y los primeros meses de este año.

La actitud de los diputados habría ayudado a mitigar los impactos de la pandemia; la cual, es la causante ya de una desaceleración económica, y un índice de desempleo (24%) y pobreza históricos (26%).

“La legislatura 2019-2020 es el segundo período más productivo en 34 años (…). El ciclo en cuestión se caracteriza además, por ser el de mayor cantidad de leyes sustantivas promulgadas. De las 159 leyes aprobadas, 100 son leyes que impactan el desarrollo humano de la sociedad costarricense, la cifra más alta en tres décadas y media. Este es un comportamiento poco usual cuando se contrasta con las tendencias de largo plazo en esta materia”, dijo el Estado de la Nación.

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Otro aspecto que destaca el informe es que en ese período el directorio legislativo estuvo controlado por fuerzas opositoras – primero por Carlos Ricardo Benavides del PLN y después por Eduardo Cruickshank de Restauración en la presidencia del Congreso - y que además, la actual Asamblea Legislativa es una de las más fragmentadas de las que se tiene registro.

"Tenemos que entender que lo más importante es el país y que si nos ponemos en peleas absurdas o poco relevantes, a final de cuentas el que sufrirá eso es el costarricense. Tenemos una situación absolutamente crítica en materia fiscal y económica en estos momentos y si no ponemos de nuestra parte, los que pagarán la factura serán los más pobres", dijo Benavides.

En ese sentido, el Congreso demostró una madurez política acorde con los difíciles tiempos que vive el país.

Otro aspecto que revela el informe, es que la acción oportuna del gobierno y los diputados, evitó una mayor catástrofe por la Covid-19.

“El Ejecutivo, particularmente el Gobierno Central, lideró la respuesta activa del aparato estatal (…) Con un corte al 24 de julio, se contabilizaban 469 medidas tomadas por el Estado costarricense para frenar la pandemia. Por su parte, la Asamblea Legislativa reaccionó, adaptó sus procedimientos con celeridad y promulgó, en pocos meses, una cosecha importante de leyes ante la llegada del Covid-19”, dijo el Estado de la Nación.

Pese a esto, la pandemia afectó particularmente a las mujeres, ya que el empleo femenino retrocedió diez años en términos absolutos y tres décadas si se considera la tasa de ocupación.

Aunque el Coronavirus hizo que hombres (47,5%) y mujeres (52,5%) perdieran un porcentaje similar de puestos de trabajo, lo cierto del caso es que el impacto fue muchísimo mayor para las féminas.

El problema es que la brecha laboral se ensanchó porque la cantidad de mujeres ocupadas el año pasado (846 mil) era considerablemente menor en relación con los hombres (1,3 millones), por lo que en términos porcentuales, cuando se dieron los despidos, el 27% de ellas se vio afectada, frente a un 16% de los hombres.

Así las cosas, la cantidad de ocupadas se sitúa ahora en 616 mil mujeres, cifra similar a la observada en el 2011; es decir, casi una década de retroceso.

No obstante, en términos de tasa, la ocupación femenina se sitúa en 31%, lo que implica un retroceso de 30 años, pues el país mostraba esa misma cifra a inicios de la década de los noventa, concluyó el Estado de la Nación.

Por otra parte, la crisis económica por pandemia del Covid-19 incrementaría la situación de pobreza de muchos hogares.

En estos momentos, una de cada cuatro familias es pobre en Costa Rica. En el último año, 84 mil familias cayeron en pobreza o pobreza extrema, lo que implica que hay 420 mil hogares en esta condición.

Asimismo, la pandemia generó un shock económico que deterioró el empleo y el PIB de manera más profunda que la crisis financiera del 2008-2009.

A julio de este año, el impacto económico ocasionado por la crisis del Covid-19 generó una contracción del 5% en el nivel de producto.

La tasa de decrecimiento de la economía, en su conjunto, alcanza un nivel extraordinariamente bajo, solamente comparable con el decrecimiento registrado en la crisis de los ochenta.