Atracción facial
| Lunes 17 agosto, 2009
Atracción facial
Las mujeres están más atraídas por los hombres que se les parecen físicamente
Londres
EFE
Las mujeres se sienten más atraídas hacia los hombres que se les parecen físicamente porque se fían más de ellos, según un estudio de la Universidad Saint Andrews (Escocia).
La investigación evaluó a un grupo de 60 mujeres que durante seis meses juzgó el atractivo de cuatro caras creadas por ordenador a partir de 50 rasgos faciales masculinos.
Las mujeres puntuaban las caras, que posteriormente eran manipuladas para darles un aspecto más o menos masculino, alterando rasgos principales como las mandíbulas y haciendo que se parecieran más o menos a los rasgos de la mujer que las evaluaba.
Realizados los cambios, las mujeres volvían a puntuar y, en su gran mayoría, daban mejor nota a las caras masculinas cuyos rasgos habían sido suavizados y ofrecían una apariencia más femenina.
El director del estudio, Tamsin Saxton, afirmó que “investigaciones previas ya habían constatado que las mujeres se pueden sentir atraídas hacia hombres con rasgos masculinos marcados, pero que estos rasgos también les hace sospechar de ellos”.
“Este estudio muestra que las mujeres tienden a fiarse más de los hombres si se les parecen. Todo parece indicar que es el parecido físico lo que elimina la sospecha”, explicó Saxton.
El estudio, que fue publicado en la revista científica Behavioral Ecology, contó con la colaboración de la Universidad de Liverpool (Inglaterra), uno de cuyos investigadores, Craig Roberts, destacó otro hallazgo interesante del estudio: que la mayoría de las mujeres prestaba especial atención a rasgos físicos concretos.
“Las mujeres se fijaron en características faciales como la forma de la cara y en rasgos específicos como la forma de la nariz o el tamaño de los ojos. El color de los ojos o de la piel no fueron tomados en cuenta por la mayoría de ellas”, indicó.
Cultura condiciona cómo interpretamos expresiones faciales
Londres
EFE
La cultura y el origen geográfico condicionan la manera en la que los seres humanos interpretamos las expresiones faciales, y no es lo mismo una cara de enfado para un occidental que para un asiático, según un estudio.
La investigación, elaborada por la Universidad de Glasgow (Escocia), concluyó que las personas de Asia oriental encuentran más dificultades para distinguir entre expresiones porque se fijan sobre todo en los ojos.
Según este trabajo, que pone en cuestión la universalidad del dicho de que “la cara es el espejo del alma”, los asiáticos tienden a ver, en mayor grado que los occidentales, sorpresa en una cara de miedo, y asco en una cara que realmente muestra enfado.
El motivo es que los individuos de distintos grupos culturales tienden a observar distintas partes de la cara para interpretar una expresión.
Los investigadores comprobaron que los asiáticos tendían a fijarse más en los ojos de la otra persona, mientras que los occidentales tendían a mirar al conjunto de la cara.
Los autores del estudio recordaron que esta diferenciación cultural en la manera de interpretar las caras entre occidentales y asiáticos también se ve en los emoticones, los caracteres tipográficos que se utilizan para expresar emociones en Internet.
Los emoticones asiáticos ofrecen rasgos mucho más marcados en la parte superior de la cara, principalmente en los ojos, mientras que los occidentales subrayan la parte inferior, sobre todo la boca.
Las mujeres están más atraídas por los hombres que se les parecen físicamente
Londres
EFE
Las mujeres se sienten más atraídas hacia los hombres que se les parecen físicamente porque se fían más de ellos, según un estudio de la Universidad Saint Andrews (Escocia).
La investigación evaluó a un grupo de 60 mujeres que durante seis meses juzgó el atractivo de cuatro caras creadas por ordenador a partir de 50 rasgos faciales masculinos.
Las mujeres puntuaban las caras, que posteriormente eran manipuladas para darles un aspecto más o menos masculino, alterando rasgos principales como las mandíbulas y haciendo que se parecieran más o menos a los rasgos de la mujer que las evaluaba.
Realizados los cambios, las mujeres volvían a puntuar y, en su gran mayoría, daban mejor nota a las caras masculinas cuyos rasgos habían sido suavizados y ofrecían una apariencia más femenina.
El director del estudio, Tamsin Saxton, afirmó que “investigaciones previas ya habían constatado que las mujeres se pueden sentir atraídas hacia hombres con rasgos masculinos marcados, pero que estos rasgos también les hace sospechar de ellos”.
“Este estudio muestra que las mujeres tienden a fiarse más de los hombres si se les parecen. Todo parece indicar que es el parecido físico lo que elimina la sospecha”, explicó Saxton.
El estudio, que fue publicado en la revista científica Behavioral Ecology, contó con la colaboración de la Universidad de Liverpool (Inglaterra), uno de cuyos investigadores, Craig Roberts, destacó otro hallazgo interesante del estudio: que la mayoría de las mujeres prestaba especial atención a rasgos físicos concretos.
“Las mujeres se fijaron en características faciales como la forma de la cara y en rasgos específicos como la forma de la nariz o el tamaño de los ojos. El color de los ojos o de la piel no fueron tomados en cuenta por la mayoría de ellas”, indicó.
Cultura condiciona cómo interpretamos expresiones faciales
Londres
EFE
La cultura y el origen geográfico condicionan la manera en la que los seres humanos interpretamos las expresiones faciales, y no es lo mismo una cara de enfado para un occidental que para un asiático, según un estudio.
La investigación, elaborada por la Universidad de Glasgow (Escocia), concluyó que las personas de Asia oriental encuentran más dificultades para distinguir entre expresiones porque se fijan sobre todo en los ojos.
Según este trabajo, que pone en cuestión la universalidad del dicho de que “la cara es el espejo del alma”, los asiáticos tienden a ver, en mayor grado que los occidentales, sorpresa en una cara de miedo, y asco en una cara que realmente muestra enfado.
El motivo es que los individuos de distintos grupos culturales tienden a observar distintas partes de la cara para interpretar una expresión.
Los investigadores comprobaron que los asiáticos tendían a fijarse más en los ojos de la otra persona, mientras que los occidentales tendían a mirar al conjunto de la cara.
Los autores del estudio recordaron que esta diferenciación cultural en la manera de interpretar las caras entre occidentales y asiáticos también se ve en los emoticones, los caracteres tipográficos que se utilizan para expresar emociones en Internet.
Los emoticones asiáticos ofrecen rasgos mucho más marcados en la parte superior de la cara, principalmente en los ojos, mientras que los occidentales subrayan la parte inferior, sobre todo la boca.