Obama le pone fecha a salida de Irak
| Sábado 28 febrero, 2009
Obama le pone fecha a salida de Irak
Tropas de combate estadounidenses dejarán el territorio iraquí para agosto de 2010
Washington
EFE
Barack Obama, presidente de Estados Unidos, anunció el viernes la salida para agosto de 2010 de las tropas de combate estadounidenses apostadas en Irak, donde quedarán entre 35 mil y 50 mil soldados en funciones de apoyo a las fuerzas iraquíes.
“Déjenme decirlo de la manera más clara posible: para el 31 de agosto de 2010 finalizará nuestra misión de combate en Irak”, afirmó el mandatario en un discurso en la base militar de Fort Lejeune, en Carolina del Norte.
Irak “no es todavía seguro, y habrá días difíciles por delante”, admitió, pero indicó que su decisión tiene en cuenta otras prioridades.
“Encaramos el desafío de centrarnos en Afganistán y Pakistán; de aliviar el peso que recae sobre nuestros militares, y de reconstruir nuestra economía. Son desafíos que vamos a encarar”, sostuvo.
Obama apuntó también al realismo: “no podemos librar a Irak de todos los que se oponen a Estados Unidos o simpatizan con nuestros adversarios (...) No podemos sostener de modo indefinido un compromiso que ha impuesto presión a nuestros militares y que ha costado casi un billón de dólares al pueblo estadounidense”.
Según el calendario trazado por Obama, cerca de 90 mil soldados abandonarán Irak en los próximos 18 meses, un plazo un poco mayor de los 16 meses que prometió en la campaña electoral, pero que, a su juicio, permitirá garantizar la seguridad en el país árabe.
Entre 35 mil y 50 mil soldados permanecerán para asistir a las Fuerzas Armadas iraquíes hasta finales de 2011, cuando expira el plazo para la permanencia de las tropas estadounidenses acordado el año pasado entre Washington y Bagdad.
En una rueda de prensa telefónica, Robert Gates, secretario de Defensa de Estados Unidos, no descartó que la presencia estadounidense pudiera prolongarse más allá de 2011, si bien indicó que eso dependerá de que Bagdad lo solicite.
“Mi punto de vista personal es que debemos estar preparados para mantener una fuerza de tamaño muy modesto con funciones de equipamiento, quizás de apoyo de inteligencia, pero por el momento no hemos recibido una petición en este sentido, ni indicios de que la vayamos a recibir”, declaró el secretario de Defensa.
La iniciativa pondrá así fin a una guerra que ha durado ya cerca de seis años, ha dejado más de 4.200 estadounidenses muertos y ha supuesto un gran peso en la economía del país.
Aunque algunos soldados regresarán ya este año, el grueso de la retirada se concentrará a lo largo de 2010, dado que en diciembre están previstas elecciones parlamentarias en Irak, indicó Gates.
En la actualidad se encuentran destinados cerca de 142 mil militares estadounidenses en suelo iraquí.
El presidente Obama quiere reforzar la presencia militar estadounidense en Afganistán a medida que disminuye en Irak y recientemente anunció el envío de cerca de 17 mil soldados adicionales al país centroasiático.
En su discurso, Obama presentó un panorama más allá del fin de la guerra en Irak y prometió potenciar sus esfuerzos diplomáticos en ese país.
Anunció que el nuevo embajador en Bagdad, que sustituirá al veterano Ryan Crocker, será Christopher Hill, hasta ahora el principal negociador estadounidense en las conversaciones sobre el programa nuclear norcoreano.
Como parte de la nueva actitud, Estados Unidos también llevará a cabo un acercamiento “sostenido y guiado por principios” a todos los países en Oriente Medio, “incluidos Irán y Siria”, afirmó el mandatario.
Estados Unidos se centrará de nuevo en la lucha contra Al Qaeda en Afganistán y Pakistán, los esfuerzos contra el programa nuclear iraní y una paz duradera entre Israel y sus vecinos, aseguró.
Tropas de combate estadounidenses dejarán el territorio iraquí para agosto de 2010
Washington
EFE
Barack Obama, presidente de Estados Unidos, anunció el viernes la salida para agosto de 2010 de las tropas de combate estadounidenses apostadas en Irak, donde quedarán entre 35 mil y 50 mil soldados en funciones de apoyo a las fuerzas iraquíes.
“Déjenme decirlo de la manera más clara posible: para el 31 de agosto de 2010 finalizará nuestra misión de combate en Irak”, afirmó el mandatario en un discurso en la base militar de Fort Lejeune, en Carolina del Norte.
Irak “no es todavía seguro, y habrá días difíciles por delante”, admitió, pero indicó que su decisión tiene en cuenta otras prioridades.
“Encaramos el desafío de centrarnos en Afganistán y Pakistán; de aliviar el peso que recae sobre nuestros militares, y de reconstruir nuestra economía. Son desafíos que vamos a encarar”, sostuvo.
Obama apuntó también al realismo: “no podemos librar a Irak de todos los que se oponen a Estados Unidos o simpatizan con nuestros adversarios (...) No podemos sostener de modo indefinido un compromiso que ha impuesto presión a nuestros militares y que ha costado casi un billón de dólares al pueblo estadounidense”.
Según el calendario trazado por Obama, cerca de 90 mil soldados abandonarán Irak en los próximos 18 meses, un plazo un poco mayor de los 16 meses que prometió en la campaña electoral, pero que, a su juicio, permitirá garantizar la seguridad en el país árabe.
Entre 35 mil y 50 mil soldados permanecerán para asistir a las Fuerzas Armadas iraquíes hasta finales de 2011, cuando expira el plazo para la permanencia de las tropas estadounidenses acordado el año pasado entre Washington y Bagdad.
En una rueda de prensa telefónica, Robert Gates, secretario de Defensa de Estados Unidos, no descartó que la presencia estadounidense pudiera prolongarse más allá de 2011, si bien indicó que eso dependerá de que Bagdad lo solicite.
“Mi punto de vista personal es que debemos estar preparados para mantener una fuerza de tamaño muy modesto con funciones de equipamiento, quizás de apoyo de inteligencia, pero por el momento no hemos recibido una petición en este sentido, ni indicios de que la vayamos a recibir”, declaró el secretario de Defensa.
La iniciativa pondrá así fin a una guerra que ha durado ya cerca de seis años, ha dejado más de 4.200 estadounidenses muertos y ha supuesto un gran peso en la economía del país.
Aunque algunos soldados regresarán ya este año, el grueso de la retirada se concentrará a lo largo de 2010, dado que en diciembre están previstas elecciones parlamentarias en Irak, indicó Gates.
En la actualidad se encuentran destinados cerca de 142 mil militares estadounidenses en suelo iraquí.
El presidente Obama quiere reforzar la presencia militar estadounidense en Afganistán a medida que disminuye en Irak y recientemente anunció el envío de cerca de 17 mil soldados adicionales al país centroasiático.
En su discurso, Obama presentó un panorama más allá del fin de la guerra en Irak y prometió potenciar sus esfuerzos diplomáticos en ese país.
Anunció que el nuevo embajador en Bagdad, que sustituirá al veterano Ryan Crocker, será Christopher Hill, hasta ahora el principal negociador estadounidense en las conversaciones sobre el programa nuclear norcoreano.
Como parte de la nueva actitud, Estados Unidos también llevará a cabo un acercamiento “sostenido y guiado por principios” a todos los países en Oriente Medio, “incluidos Irán y Siria”, afirmó el mandatario.
Estados Unidos se centrará de nuevo en la lucha contra Al Qaeda en Afganistán y Pakistán, los esfuerzos contra el programa nuclear iraní y una paz duradera entre Israel y sus vecinos, aseguró.