Marchas inundan las calles de Sucre
| Sábado 08 septiembre, 2007
Oposición boliviana pide cerrar Asamblea
Marchas inundan las calles de Sucre
Sucre
EFE
Una masiva marcha mostró el viernes la firmeza de Sucre para exigir a Evo Morales, presidente de Bolivia, ser la capital efectiva y no sólo oficial de Bolivia, mientras opositores pidieron clausurar la Asamblea Constituyente por el riesgo de desórdenes y choques civiles.
Los sucrenses ocuparon sus calles como ocurre desde hace tres semanas, en otra demostración de fuerza que contrastó con los infructuosos llamados al diálogo del Gobierno, que citó a los dirigentes de Sucre en Potosí pese a saber que ellos insisten en negociar en su ciudad.
Miles de personas engrosaron la ruidosa movilización organizada por obreros, maestros y estudiantes que colapsaron el tránsito en las estrechas calles de esta pequeña ciudad de centro colonial hispánico, que con las protestas ya cotidianas ha cambiado su tradicional cara pacífica.
“Sucre de pie, Evo de rodillas”, fue uno de los cánticos más extendidos durante la marcha, alternado con convocatorias a más sucrenses para aumentar las movilizaciones, e insultos a la presidenta de la Asamblea, la oficialista Silvia Lazarte, según constataron enviados de Efe.
El rector universitario de Sucre, Jaime Barrón, uno de los líderes de las protestas, destacó el carácter pacífico de la marcha, aunque también justificó la violencia de sus estudiantes en días pasados con el argumento de que fue una reacción “a la violación de la norma y el derecho constituido”.
“Chuquisaca está ofreciendo al país un espacio de defensa de la democracia de forma pacífica y con diálogo”, dijo el rector, y abogó porque los 100 mil campesinos afines a Morales que prevén llegar a la ciudad el próximo lunes tengan la misma predisposición para no desatar la violencia.
La presencia campesina fue confirmada el viernes por las federaciones de productores de coca del Chapare, que preside Morales, que anunciaron la llegada de 20 mil afiliados a Sucre para respaldar la reapertura de la Asamblea, según informó la Agencia Boliviana de Información (ABI, oficial).
Barrón calificó de “intimidatoria” la presencia de los campesinos pro gubernamentales, pero insistió en que los sucrenses “no responderán a la confrontación” y los tratarán de forma fraternal, como en el 2006, cuando Morales llevó a indígenas para inaugurar la Constituyente.
El mandatario aimara ha responsabilizado varias veces a las “oligarquías” de haber introducido la disputa por la capital en la Asamblea.
Sin embargo, el constituyente Edgar Arraya, electo por el partido de Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), dijo el viernes a Efe que eso es “falso” y que, de hecho, fue una oferta electoral del oficialismo en Sucre.
En La Paz, tres diputados del mayor partido de la oposición de derecha, Poder Democrático y Social (Podemos), pidieron al vicepresidente, Alvaro García Linera, también “presidente nato” del Congreso, que agilice el trámite de un proyecto de cierre temporal de la Constituyente porque el diálogo no llega y se temen enfrentamientos graves.
También el senador del MAS Guido Guardia ha pedido la clausura de la Asamblea, y el portavoz de Morales, Alex Contreras, ha dicho que si la situación en Sucre sigue impidiendo las sesiones, solo habrá dos alternativas: cerrarla temporalmente o llevarla a otra ciudad.
Marchas inundan las calles de Sucre
Sucre
EFE
Una masiva marcha mostró el viernes la firmeza de Sucre para exigir a Evo Morales, presidente de Bolivia, ser la capital efectiva y no sólo oficial de Bolivia, mientras opositores pidieron clausurar la Asamblea Constituyente por el riesgo de desórdenes y choques civiles.
Los sucrenses ocuparon sus calles como ocurre desde hace tres semanas, en otra demostración de fuerza que contrastó con los infructuosos llamados al diálogo del Gobierno, que citó a los dirigentes de Sucre en Potosí pese a saber que ellos insisten en negociar en su ciudad.
Miles de personas engrosaron la ruidosa movilización organizada por obreros, maestros y estudiantes que colapsaron el tránsito en las estrechas calles de esta pequeña ciudad de centro colonial hispánico, que con las protestas ya cotidianas ha cambiado su tradicional cara pacífica.
“Sucre de pie, Evo de rodillas”, fue uno de los cánticos más extendidos durante la marcha, alternado con convocatorias a más sucrenses para aumentar las movilizaciones, e insultos a la presidenta de la Asamblea, la oficialista Silvia Lazarte, según constataron enviados de Efe.
El rector universitario de Sucre, Jaime Barrón, uno de los líderes de las protestas, destacó el carácter pacífico de la marcha, aunque también justificó la violencia de sus estudiantes en días pasados con el argumento de que fue una reacción “a la violación de la norma y el derecho constituido”.
“Chuquisaca está ofreciendo al país un espacio de defensa de la democracia de forma pacífica y con diálogo”, dijo el rector, y abogó porque los 100 mil campesinos afines a Morales que prevén llegar a la ciudad el próximo lunes tengan la misma predisposición para no desatar la violencia.
La presencia campesina fue confirmada el viernes por las federaciones de productores de coca del Chapare, que preside Morales, que anunciaron la llegada de 20 mil afiliados a Sucre para respaldar la reapertura de la Asamblea, según informó la Agencia Boliviana de Información (ABI, oficial).
Barrón calificó de “intimidatoria” la presencia de los campesinos pro gubernamentales, pero insistió en que los sucrenses “no responderán a la confrontación” y los tratarán de forma fraternal, como en el 2006, cuando Morales llevó a indígenas para inaugurar la Constituyente.
El mandatario aimara ha responsabilizado varias veces a las “oligarquías” de haber introducido la disputa por la capital en la Asamblea.
Sin embargo, el constituyente Edgar Arraya, electo por el partido de Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), dijo el viernes a Efe que eso es “falso” y que, de hecho, fue una oferta electoral del oficialismo en Sucre.
En La Paz, tres diputados del mayor partido de la oposición de derecha, Poder Democrático y Social (Podemos), pidieron al vicepresidente, Alvaro García Linera, también “presidente nato” del Congreso, que agilice el trámite de un proyecto de cierre temporal de la Constituyente porque el diálogo no llega y se temen enfrentamientos graves.
También el senador del MAS Guido Guardia ha pedido la clausura de la Asamblea, y el portavoz de Morales, Alex Contreras, ha dicho que si la situación en Sucre sigue impidiendo las sesiones, solo habrá dos alternativas: cerrarla temporalmente o llevarla a otra ciudad.