Región resentiría desaceleración de EE.UU.
| Martes 11 diciembre, 2007
Región resentiría desaceleración de EE.UU.
Sao Paulo
Bloomberg
Las economías latinoamericanas enfrentaran el mayor desafío para el crecimiento en casi cinco años en 2008 pues Estados Unidos probablemente caerá en recesión, predijo Morgan Stanley & Co. en un reporte.
El impacto en América Latina de una desaceleración de la economía estadounidense ha sido subestimado, según opinaron Gray Newman, economista en jefe para América Latina, y Daniel Volberg, analista, en un reporte dado a conocer ayer. Morgan Stanley espera que la economía de Estados Unidos, la más grande del mundo y el mayor mercado para las exportaciones latinoamericanas, se encoja en el primer semestre del año entrante conforme el consumo se estanque.
Un año de desaceleración en Estados Unidos podría poner a prueba si los esfuerzos de los gobiernos latinoamericanos por imponer disciplina presupuestaria y monetaria, y por diversificar los mercados de exportación han sido adecuados para salvaguardar el crecimiento a largo plazo, después de cuatro años de precios récord en las materias primas y bajos costos del crédito, dijo Newman.
“Hemos encontrado que la mayor parte de la mejora en Latinoamérica desde que comenzamos a observar la abundancia en 2003 ha provenido de factores externos”, comentó Newman en una entrevista telefónica desde Boston. “De tal forma que si la recesión en Estados Unidos se desarrolla durante 2008, América Latina tendría que enfrentar la primera prueba de fuego”.
Morgan Stanley redujo sus proyecciones de crecimiento para la economía mexicana durante 2008 a un 2,6% desde un 3,2%, citando los estrechos lazos comerciales con Estados Unidos. Los bancos centrales en Brasil, Colombia y Perú podrían tener poco o ningún espacio de maniobra para aliviar la política monetaria el próximo año.
México envía más del 80% de las exportaciones a Estados Unidos. Brasil, que se ha convertido en dependiente de las ventas de materias primas en el exterior, podría ver como su crecimiento se desacelera a un 3% desde cerca del 5% actual si la situación en Estados Unidos golpea la demanda mundial de materias primas.
Sao Paulo
Bloomberg
Las economías latinoamericanas enfrentaran el mayor desafío para el crecimiento en casi cinco años en 2008 pues Estados Unidos probablemente caerá en recesión, predijo Morgan Stanley & Co. en un reporte.
El impacto en América Latina de una desaceleración de la economía estadounidense ha sido subestimado, según opinaron Gray Newman, economista en jefe para América Latina, y Daniel Volberg, analista, en un reporte dado a conocer ayer. Morgan Stanley espera que la economía de Estados Unidos, la más grande del mundo y el mayor mercado para las exportaciones latinoamericanas, se encoja en el primer semestre del año entrante conforme el consumo se estanque.
Un año de desaceleración en Estados Unidos podría poner a prueba si los esfuerzos de los gobiernos latinoamericanos por imponer disciplina presupuestaria y monetaria, y por diversificar los mercados de exportación han sido adecuados para salvaguardar el crecimiento a largo plazo, después de cuatro años de precios récord en las materias primas y bajos costos del crédito, dijo Newman.
“Hemos encontrado que la mayor parte de la mejora en Latinoamérica desde que comenzamos a observar la abundancia en 2003 ha provenido de factores externos”, comentó Newman en una entrevista telefónica desde Boston. “De tal forma que si la recesión en Estados Unidos se desarrolla durante 2008, América Latina tendría que enfrentar la primera prueba de fuego”.
Morgan Stanley redujo sus proyecciones de crecimiento para la economía mexicana durante 2008 a un 2,6% desde un 3,2%, citando los estrechos lazos comerciales con Estados Unidos. Los bancos centrales en Brasil, Colombia y Perú podrían tener poco o ningún espacio de maniobra para aliviar la política monetaria el próximo año.
México envía más del 80% de las exportaciones a Estados Unidos. Brasil, que se ha convertido en dependiente de las ventas de materias primas en el exterior, podría ver como su crecimiento se desacelera a un 3% desde cerca del 5% actual si la situación en Estados Unidos golpea la demanda mundial de materias primas.