Logo La República

Viernes, 19 de abril de 2024



NOTA DE TANO


Nota de Tano

Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Martes 30 diciembre, 2014

Gaetano Pandolfo

Siempre fui “hincha” del Inter de Milán.

Era, y ahorita ni sé si es, mi equipo en Italia.

Su histórico banderín con los colores azul y negro engalanó muchos años el interior de mis automóviles.

Sus futbolistas italianos, iconos del país y de la selección “azurra”, como Tarcisio Burgnich, Giacinto Fachetti, Walter Zenga, Sandro Mazzola, Sandro Altobelli y tantos más, eran mayoría en un club que hacía honor a su nombre firmando futbolistas extranjeros de categoría, a lo sumo dos o tres por temporada.

Sin embargo, cuando se permitió que jugaran en los clubes italianos futbolistas naturalizados, descendientes de italianos y mancomunados, las nóminas de los equipos de Italia dieron un giro y ahora es a la inversa.

Cuesta ver equipos en el campeonato italiano con mayoría de nacionales y esto, más las nuevas numeraciones de los jugadores me ahuyentaron del calcio. Lo he escrito varias veces: no soporto ver a un portero jugar con el número 67 y a un centro delantero con el 93. Supongo que son cosas de “roco”.

Recientemente se jugó la final de la Supercopa de Italia entre Nápoles y Juventus. Razones económicas y políticas que deberían estar ajenas al fútbol, llevaron este partido a Doha para deleite de unos jeques multimillonarios y desde luego los jerarcas de FIFA, quienes no se cansan de chupar la teta más sabrosa del fútbol mundial, viajando como reyes a los lugares más sofisticados del planeta.

Pobres hombres estos, que solo tienen poder y placeres propios de sus cargos, pero que entran mirando para abajo a las ceremonias de premiación, aborrecidos por la feligresía que los saludan por mero protocolo y a regañadientes y si pueden se los saltan, como hizo Cristiano con Platini.

No poder mirar de frente prácticamente a nadie tiene su precio; los jerarcas de FIFA lo cargan en sus conciencias.

Pues bien, en ese partido de la Vieja Señora y los celestes que hizo bicampeón Diego Maradona, solo jugaron seis italianos entre los 22 titulares; cinco en Juventus y solo uno en Nápoles. ¡Qué pena!

Gianluigi Buffon, Leonardo Bonucci, Giorgio Chiellini, Andrea Pirlo y Claudio Marchisio en la escuadra de Turín y solo el lateral Christian Maggio entre los napolitanos.

Esto es triste y hasta decadente en el fútbol italiano; su liga ha perdido peso, renombre, carece de figuras deslumbrantes y según lo dijo Arrigo Sacchi, ha sido superada por otras cinco ligas europeas, incluyendo la lusitana.

El fútbol italiano urge de un terremoto en su interior.


NOTAS ANTERIORES


Guimaraes muestra al León con otra cara táctica

Viernes 19 abril, 2024

Por respeto a la trayectoria de Alexandre Guimaraes, no podemos calificar la formación del Alajuelense en sus dos últimos partidos, como ocurrencia o invento.

Herediano recibe a un cartaginés motivado al tope

Jueves 18 abril, 2024

Las huestes del “Pity” Arellano tienen una tarea bien complicada, porque se las verán con su enconado e histórico rival, el Cartaginés

Lo bueno, lo malo y lo feo de la NBA

Martes 16 abril, 2024

La temporada regular de la NBA concluye y cada conferencia tiene definidos a los 10 equipos que siguen con aspiraciones de ser campeones.







© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.