Los cinco pecados de los conductores
| Viernes 26 julio, 2013
Choferes son multados por infracciones fácilmente evitables
Los cinco pecados de los conductores
Irrespetar las señales de tránsito y entrar al casco central con restricción son parte de las causas por las que se hacen más multas
No portar el equipo básico de seguridad en el carro, brincarse la luz roja del semáforo o simplemente “jugársela” y entrar a San José el día de la restricción pasaron de ser simples imprudencias aisladas a convertirse en malas prácticas cotidianas de las más multadas en carretera.
Aunque la nueva Ley de Tránsito es bastante clara, muchos conductores todavía dicen no conocer algunas normas o requisitos, de acuerdo con German Marín, director de la Policía de Tránsito.
Comprar un kit de seguridad para el carro cuesta poco más de ¢30 mil; por otra parte si a usted lo detiene un oficial de tránsito sin este equipo la multa será de ¢20 mil, algunos conductores recibieron más de un parte por este motivo.
Pasar una señal de alto a gran velocidad y seguir cuando la luz del semáforo estaba todavía en rojo son parte de las imprudencias que a diario se dan en las calles nacionales y que podrían pasar de una multa a un accidente.
Quienes cometen la “mala práctica” de no respetar la señales de tránsito deben pagar ¢47 mil por el parte; eso sí, más allá de la imprudencia y del dinero que deben pagar lo importante es evitar este tipo de acciones que también podrían ayudar a reducir la cantidad de muertes en carretera.
Tener un carro y no poder utilizarlo durante todo un día por la restricción vehicular es una tortura para muchos que prefieren obviar la normativa y “jugársela”, entran a la Circunvalación o al centro de la capital y manejan con precaución para no ser identificados por un policía de tránsito.
En ocasiones se pegan mucho al carro de adelante para evitar que les hagan la multa, y esto provoca choques; entonces reciben partes por el choque y por la restricción, afirmó Marín.
Si usted entra con placa restringida al casco central se expone a una multa de ¢20 mil según la Ley de Tránsito.
Otro problema bastante común y que se aprecia con facilidad cuando se transita por los centros de ciudades es parquear en zonas prohibidas o en línea amarilla, por esta causa se han confeccionado 30 partes diarios en lo que va de 2013.
Aunque más abajo en las estadísticas, pero siempre importante aparecen quienes todavía salen de su casa sin usar el cinturón de seguridad, una práctica tan sencilla que logró salvar a nueve de cada diez personas en accidentes de transito alrededor del mundo en la última década.
Transitar sin esta medida de seguridad sí le sale más caro en caso de que le hagan un parte, la sanción es de ¢94 mil que podría ahorrar con solo colocar la faja protectora de su carro y que además le garantizará un viaje más seguro.
Manuel Avendaño
mavendano@larepublica.net