Miles de ticos festejaron la clasificación en las calles

¡Locura!

Todo un país se lanzó a las calles a llorar la hazaña de la Selección, tras su gane ante el tetracampeón del mundo Italia.
Tras el pitazo, la capital fue tomada por una marea roja, desde Paseo Colón hasta la Fuente de la Hispanidad.
¡Sí se pudo! Fue la exclamación que niños, jóvenes y adultos gritaban en compañía del sonido de tambores, cornetas y pitos.
Nadie tomó la hora de almuerzo, entre ellos Luis Guillermo Solís, quien salió de Casa Presidencial para unirse con el resto de los aficionados en San Pedro.
“Estoy encantado por el triunfo de Costa Rica ante Italia, porque fue un partido que se jugó en condiciones estupendas. La Sele demostró todo lo que tenía, fuerza, inteligencia, orden táctico y creatividad”, exclamó Solís.
El tradicional recorrido alrededor de la fuente se realizó como de costumbre, pero esta vez con un sentimiento con sabor a victoria mundialista, que incluso supera el de hace 24 años.
Los gritos, las risas y algunas lágrimas eran de las imágenes más emotivas, y las cuales quedarán grabadas en la historia del fútbol costarricense.
Conforme transcurrían los minutos, y pasaba el mediodía, más gente se unía a la fiesta.
“Vengo desde Cartago, es increíble el gane de la Sele, es que nadie se lo esperaba, pero con eso le demostramos al mundo lo que somos”, comentó Alejandra Villalobos.
La alegría se convirtió en el aire del lugar, la bandera de Costa Rica el accesorio que imponía tendencia en el momento y los gritos era la forma en que los costarricenses mejor se expresaban por el gane de la Selección Nacional.
Ese sentimiento lo regaló el equipo de Jorge Luis Pinto, al que se le dieron las estadísticas más bajas de pase a los octavos de final del “Grupo de la Muerte”, y el cual repitió la historia de hace 24 años, clasificar a los octavos de final.

Fabiola Vargas
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