Estudiante del Liceo Franco Costarricense promueve al colegio como Benemérito de la Patria

Con el objetivo de reconocer el valioso aporte que ha hecho el Liceo Franco Costarricense a la sociedad tica, el estudiante Emiliano Céspedes, presentó un proyecto de ley a la Asamblea Legislativa para declarar a esa institución como Benemérita de la Educación y la Cultura Costarricense.

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Y es que el Franco es uno de los principales referentes y asesores del Gobierno en cuanto la educación del francés, a la vez que es una institución pública tanto de Costa Rica, como de Francia, en la cual, conviven bajo un mismo techo más de 27 nacionalidades diferentes y se imparten lecciones en tres idiomas diferentes (español, francés e inglés).

“En el Franco se forma una mezcla cultural extraordinaria, que le permite a toda aquella persona que ha caminado por estos pasillos ser un ciudadano del mundo, con una mentalidad abierta y, sobre todo, estar dotado de pensamiento crítico. Sumado a esto último, el Franco ha sido históricamente sinónimo de excelencia académica”, dijo Céspedes.

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La iniciativa en cuestión rinde homenaje a una institución sinónimo de excelencia académica, pluriculturalidad e inclusión, al mismo tiempo que rinde homenaje a las históricas relaciones fraternales entre Costa Rica y Francia, agregó Céspedes.

El Liceo Franco Costarricense se ubica en La Unión de Tres Ríos y fue fundado en 1967.

La iniciativa en cuestión fue presentada a través del departamento de iniciativa popular, con el objetivo de que sea impulsada por un diputado y avance con todo el trámite parlamentario.

Para apoyar la iniciativa, el alumnado abrió la dirección de correo electrónico benemeritazgo@francocostarricense.ed.cr para la recepción de testimonios y cartas de apoyo de cualquier persona relacionada con la Institución, incluido personal, alumnos, exalumnos y otros, en aras de ser remitidas a los diputados.

“Los jóvenes tenemos el deber, más que nadie, de involucrarnos en la política y en todos los asuntos que encierran nuestra vida en sociedad, pues, las decisiones que se toman hoy en día son las que afectarán el futuro en el cual viviremos, por lo que somos los principales interesados en que ese futuro sea prodigioso. De la misma manera, con las juventudes, vienen nuevas ideas, mentalidades y objetivos, que han de ser tomados en cuenta”, finalizó Céspedes.